Por Fernando Gourovich
Hasta ahora, el equipo que dirige De Felippe sumó más como
visitante que en su casa.
Bajo techo. El plantel se entrenó ayer en Barracas. /
CAINDEPENDIENTE.COM.
Sabe Omar De Felippe que para lograr el objetivo principal,
retornar a la máxima categoría, hay que hacerse muy fuerte en el Libertadores
de América.
Es fundamental. No hay otra matemática.
Va un dato para certificar
esta “tesis”: dos de los tres equipos que hoy están ascendiendo, Banfield (19
puntos) y Defensa y Justicia (18), encabezan la tabla de posiciones en
condición de local. Otro más: a Crucero del Norte, una de las revelaciones,
anda haciendo un campañón en Posadas y con eso le alcanza para mantenerse
expectante. En total suma 23, 20 de ellos en su casa...
Independiente no es el mejor ni el peor anfitrión. Ni fu, ni
fa. Perdió un solo partido, ante Brown de Adrogué, el día del angustiante
estreno en la segunda categoría.
Después, no volvió a perder. Pero sí, perdió
muchos puntos. Son seis los encuentros que lleva sumando después de aquel
sopapo , de los cuales ganó dos, ante Sarmiento y Crucero del Norte, ambos 2 a
1; y empató los otros cuatro, con Aldosivi (con Miguel Brindisi como
entrenador), Independiente de Mendoza (debutó De Felippe), Banfield y Unión.
Precisamente, aún duelen esos dos puntos que el Rojo perdió ante los
santafesinos.
Le cuesta extender rachas positivas en casa.
La última vez que hizo valer la local fue en el Clausura
2010: entre la fecha 2 y la 12 hilvanó media docena de victorias (más dos
partidos sin perder que arrastraba del Apertura 2009). El equipo, conducido en
ese entonces por el Tolo Gallego, terminó peleando el torneo hasta el final;
aunque no le dio para arrebatarle el título al Argentinos del Bichi Borghi.
De local acumula un punto menos que de visitante: 10 contra
11. Lleva disputados 7 encuentros. El lunes se las verá ante Gimnasia de Jujuy,
el equipo que le dio la peor de las despedidas a la Doble Visera y que está a 2
unidades de Independiente. Luego, recibirá a Ferro (el miércoles 13, por la
jornada 17), a Douglas Haig y despedirá el año a fin de noviembre contra
Instituto.
Para lograr el primer objetivo que se puso De Felippe,
llegar entre el sexto y séptimo puesto antes del receso, tiene la obligación de
sumar casi todo lo que tiene en juego en casa.
“De local no sirven los empates. Hay que ganar” , dice y
repite el técnico. Y claro, sabe que de eso eso depende el retorno.
Fuente Clarín
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