Hasta siempre Mariscal

Por Cristian Fernández

La despedida de Gabriel Milito tuvo de todo, pero lo más saliente fue desde su ingreso al campo de juego. Un sinfín de jugadores talentosos, algunas emociones y un par de videos que llegaron al corazón del agasajado.

Más allá del espectáculo en sí y todo lo que rodeó a la fiesta, Gabriel Milito saltó a la cancha pasadas las 20:15 y allí adentro lo esperaban todos los futbolistas que, nombrados uno por uno, se hicieron presentes para la despedida del último Mariscal. Jugadores de la talla de Javier Zanetti, Esteban Cambiasso, Javier Mascherano, Andrés D`Alessandro, Diego Forlán, Germán Denis, Juan Sebastián Verón, Maxi Rodríguez, Gabriel Heinze, Guillermo Pereyra, Leonardo Ponzio, entre muchos otros.

También estaban los compañeros del equipo campeón 2002. Leo Díaz, Damián Albil, Juan José Serrizuela, Raúl Damiani, Hernán Franco, Matías Villavicencio, Fede Domínguez, Juan Eluchans, Lucas Pusineri, Leonel Ríos, Diego Castagno Suarez, Pablo Guiñazú, Federico Insúa y Daniel Montenegro. Uno de los ausentes de ese gran conjunto, dirigido por el Tolo Gallego hace 11 años y esta noche también, fue Andrés Silvera.

Además estuvieron Cristian Tula, Raúl Cascini, el Negro Leandro Avila, Hernán Fredes, Facundo Parra y el gran Dany Garnero, que tuvo tres chances para inflar la red, pero se lo notó errado con el arco. Algunos jugadores vistieron las dos camisetas, o sea, la blanca de los amigos y en el segundo tiempo la roja del Campeón 2002. Ellos fueron Cambiasso, Zanetti y Forlán. El árbitro del encuentro fue Héctor Baldassi, el mismo que en el Independiente 4-1 Racing en el Monumental le mostró lo supo expulsar al Mariscal.

Yendo al juego propiamente dicho, hay que destacar que parecía que ambos equipos jugaban sin arcos. Sin embargo, el que rompió el marcador fue Maxi Rodríguez. Sí, los amigos de Gaby se pusieron al frente en el marcador gracias a un pase exquisito de Juan Sebastián Verón para y el posterior “empuje a la red” del jugador de Newell`s.

Esto provocó, no sólo que Gaby intente comandar a su equipo hacia el empate, sino que además lo enojó al Mariscal y el que la ligó en dos oportunidades fue su hermano Diego.  El primer tiempo terminó 2-1 gracias al empate del Pocho Insúa (pared con Daniel Montenegro) y un penal convertido por el agasajado, quien le solicitó jocosamente al Tolo si lo autorizaba.

En el segundo tiempo hubo varios cambios, pero cuando se presagiaba que los dirigidos por José Néstor Pekerman podían igualar apareció Juan Eluchans (se lo notó feliz de jugar en el Rojo aunque sea un rato) para el 3-1 y, en el final, con el ingreso de los dos hijos de Milito, llegó el 4-1 por la definición oportunista de Santiago Milito, el más grande de los dos.

Para el cierre había más sorpresas. Ya con la familia en la cancha Milito disfrutó dos videos. Uno con algunos de sus ex compañeros del Barcelona, entre los que se destaca Pinto, Piqué, Puyol y hasta el enorme Iniesta. Mientras que el último, fue uno video de su familia con palabras de reconocimiento para el Mariscal que finalizó con todo a puro grito.

Ovaciones hubo muchas en toda la noche, pero las manos rojas se fueron por aplaudirlo a Gabriel Milito, que día tras día demuestra que su respeto por el escudo es único y su amor por la Institución es enorme y eterno. Salud Gaby… “Muchas Gracias Mariscal”.

Fuente Infierno Rojo