Pellegrino se enojó al ser consultado sobre su continuidad,
pero avisó que quiere seguir en el club.
¿Te gustaría continuar con tu proyecto cuando termine este
campeonato? Mauricio Pellegrino escucha la pregunta con atención y su cara se
transforma. La sonrisa se borra y su semblante adusto delata que el tema
evidentemente le genera incomodidad. “Esa no es una pregunta para mí. Soy
consciente del lugar que ocupo y del entorno. Ya manifesté que mi deseo es
seguir porque me encanta lo que hago. Tengo contrato hasta el final de la
temporada, pero estoy concentrado en el próximo partido”, comentó el técnico,
quien considera que el balance de su estadía en el club deja un saldo positivo:
“Hace bastante tiempo que Independiente es un club normal. Desde que nosotros
estamos, el equipo siempre ha sido competitivo. Hemos hecho cosas buenas aun no
cumpliendo con las expectativas”.
Longaniza nunca logró vencer el escepticismo con el que los
hinchas lo recibieron. Estuvo cerca de lograrlo en el torneo pasado, pero el
equipo se desmoronó cuando lo golpearon las primeras adversidades y no logró
reponerse a ellas. El descontento se expresa en la cortina de silbidos que
suele despedir al equipo cuando el rendimiento no convence. “Precisamos unidad.
Es un contexto que no podemos cambiar y hay que asumir la responsabilidad.
Nosotros necesitamos a la gente”, remarcó el entrenador.
El sábado, contra San Lorenzo, el Rojo jugará su última
carta para tratar de pelear el torneo hasta el final. Pellegrino aseguró que va
a poner a Vera para reemplazar a Cebolla Rodríguez: “Diego hizo las cosas bien
contra Racing a pesar de que no estaba en su mejor momento futbolístico. Es un
jugador muy importante a pesar de que no está 10 puntos”. Para el DT,
Independiente aún sigue con vida: “Si ganamos, tendremos muchas chances, pero
si no lo logramos, dependeremos de una carambola”.
Fuente Olé
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