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miércoles, 27 de agosto de 2014

Bahía milagrosa




Olimpo recibió a Independiente en Bahía.

Por Maxi Espejo

En cinco minutos, Independiente se quedó con un triunfo importantísimo ante Olimpo de visitante. Lo perdía por 1-0, pero logró darlo vuelta con las apariciones de Penco y Mancuello en el final. Así, se recupera antes del clásico con Racing.

El fútbol es el arte de lo impensado. Puede ocurrir de todo en cuestión de minutos. Un mero ejemplo fue lo sucedido en Bahía Blanca. Lo ganaba Olimpo durante gran parte del segundo tiempo, pero Independiente encontró la salvación en el final, en apenas cinco minutos, para llevarse un triunfo vital antes del clásico del domingo frente a Racing. Bahía milagrosa para el Rojo, sin dudas.

El primer tiempo no ofreció demasiado entre dos equipos que querían recomponer su imagen y volver al triunfo. Equilibrados 45 minutos entre un Independiente que intentó hacerse dueño de la pelota con Montenegro como abanderado y un Olimpo dispuesto a salir rápido, sin demasiadas transiciones, para llevar peligro al arco del Ruso Rodríguez. No ocurrió demasiado. Un marco muy pobre.

En el ST llegaron las emociones. Durante los primeros minutos, Cuero explotó su velocidad y el Ruso Rodríguez se lo llevó puesto. Indiscutible penal que Blanco se encargó de transformar en gol. Tercer grito por esta vía para el volante en lo que va de torneo. El Aurinegro cedió la pelota en los siguientes minutos y lo terminaría pagando muy caro.

Considerable error de Perazzo.

Sin jugar bien, como podía, el team de Almirón fue por el empate. Sin ideas nítidas, pero con ímpetu. No quería su tercera derrota al hilo ante un rival que se había quedado con diez por roja a Blanco. Cuando el reloj comenzaba a apretar, Pisano, que entró en el ST, le metió un enorme centro a Penco para estampar el 1-1. Y, ya en el segundo minuto agregado, cuando Olimpo no terminaba de acusar el primer golpe, Montenegro habilitó a Mancuello y, con gran definición de zurda, le dio la victoria al Diablo. Tan necesitada como determinante para llegar con un ánimo mejor al derby de Avellaneda.


Fuente Olé

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