Los que fueron titulares el sábado realizaron trabajos
regenerativos mientras que los suplentes, fútbol informal.
Por Favio Verona
Entre caras serias y malhumor, el plantel volvió al trabajo.
El cuerpo técnico planea trabajar bastante en lo anímico esta
semana.
El clima es denso en el predio de Villa Domínico.
El malhumor
se propaga como nunca por cada rincón del lugar y se torna contagioso.
Los
rostros, serios e inmutables, encabezan un desfile interminable.
Nadie se
atreve a esbozar ni siquiera una tenue sonrisa.
No hay motivos para hacerlo. Se
escuchan pocas palabras. Los diálogos son efímeros, las respuestas secas, pero
el silencio aturde, refleja con elocuencia el estado de ánimo de un plantel que
no puede disimular las secuelas de un golpe demoledor.
Un patrullero custodia
la puerta del predio y otro las adyacencias de la cancha en donde trabajan los
jugadores para disolver el temor de posibles visitas indeseables.
Independiente
vive el día a día más difícil de su historia.
Por eso mismo, el cuerpo técnico
planea trabajar más en lo anímico que en lo físico y futbolístico durante esta
semana. “Hay que levantarles el ánimo a los muchachos e inculcarles que todavía
se puede”, contó alguien del grupo de trabajo de Miguel Brindisi.
Los jugadores que fueron titulares el sábado trotan
alrededor del campo de juego mientras los suplentes participan de un partido de
fútbol informal.
Un Brindisi gobernado por la preocupación, con un semblante
mucho más serio que el habitual, busca el momento propicio para conversar con
los jugadores e intentar inflarlos en lo anímico.
Gabriel Milito, como siempre
en este ciclo, también está allí para respaldar al grupo.
Será una semana de mucho trabajo para el entrenador. En
el cuerpo técnico consideran que deberán hacer hincapié en lo mental para
tratar de fortalecer a un grupo alicaído. Miguel es de los entrenadores que
consideran que el factor psicológico es preponderante cuando las piernas no
brindan garantías ni certezas.
“Se nota que hay un bloqueo anímico y vamos a
tener que trabajar mucho en ese aspecto”, había dicho el técnico del Rojo en
los días posteriores a su asunción.
Ahora tendrá la difícil misión de volver a
levantar a la tropa.
Fuente Olé
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