El Oso y la Joya: Lucas Pratto y Paulo Dybala, dos caras nuevas en el ataque de la selección

Sin Higuaín, Agüero y Tevez, la Argentina contará con una dupla ofensiva impensada hace unas semanas

Por Alejo Vetere

 Pratto y Dybala, la delantera que estrena Bauza frente a Uruguay.

MENDOZA.- Paulo Dybala , de 22 años, y Lucas Pratto , de 28, recorrieron caminos muy diferentes para coincidir esta noche en el seleccionado. Uno llega apoyado en su presente y el otro tiene en el futuro su mayor capital. Se encontrarán de manera circunstancial como referencia de ataque ante Uruguay, en una posición que tiene una hegemonía indiscutible desde hace muchos años. Son las caras diferentes del seleccionado y constituyen, sin duda, una sociedad impensada tan sólo hace. algunos días.

Dybala es la "joya" del fútbol argentino, la pieza más valiosa en una lógica transición que progresivamente atravesará a la selección. En 2012 se marchó al fútbol italiano antes que pudiera debutar en la primera división en la Argentina. De Instituto, en la B Nacional, a ser una estrella de Juventus, en apenas cuatro años. En el medio, Palermo como trampolín. Martino ya había comenzado a incorporarlo a la atmósfera albiceleste, y la citación de Bauza obedece a su lógica proyección internacional.

Pratto, con otros pergaminos, se destaca en Atlético Mineiro, se instaló con autoridad en el fútbol brasileño, y su convocatoria responde más a una debilidad de Bauza . El llamado lo tomó por sorpresa, aunque es cierto que el flamante DT siempre lo tuvo en la mira.

Aunque Dybala jugó algunos minutos ante Paraguay, Brasil y Colombia en la ruta eliminatoria entre octubre y noviembre del año pasado, esta noche tendrá aroma a debut para él. Nunca fue titular. Martino lo excluyó de la lista de la Copa América y Juventus no lo autorizó a participar de los Juegos Olímpicos de Río. "Nunca tuve la oportunidad de jugar un torneo con la selección, compartir plantel, conocer a mis compañeros, no lo pude hacer en juveniles.", se lamentó el cordobés en una charla con LA NACION, en mayo.

Pratto, en cambio, es consciente de que su situación es diferente. "Soy multiuso", suelta y se ríe. Se ríe porque ni en sus mejores sueños se imaginó que compartiría plantel con Messi. Y también porque no olvida esa felicidad que sintió cuando su mamá lo acompañó a la zapatería del barrio para que, por 30 pesos, le confeccionaran unos botines. de imitación. "Ese zapatero te hacía los botines y le ponía la marca que quisieras. No quedaban iguales a los originales, pero estaba la pipa", recuerda.

La lesión de Sergio Agüero y la licencia que se tomó Gonzalo Higuaín harán que la selección busque el gol con armas nuevas. Se suma además el prolongado bajón futbolístico de Carlos Tevez. Ellos tres, además de Messi, claro, han sido los referentes de ataque del seleccionado en los últimos años. Para Dybala y Pratto su tiempo juntos es aquí y ahora.

La aspiración de Dybala es poder afianzarse en el plantel. "Sueño con estar en Rusia. Voy a luchar para estar en el Mundial, algo incomparable. Sería importante llegar con experiencia", avisa. En su última convocatoria, en marzo, llegó lesionado para hacerse exámenes médicos. No pudo jugar ni un minuto, pero el cordobés se llevó un recuerdo imborrable de cómo conoció a Messi. "Era temprano y me encontré con él en la sala de los médicos, fue una sensación rara: conocer a tu ídolo te conmueve. A todos les debe pasar, a mí también. Lo saludé y hablamos un rato", relató semanas atrás.

Pratto mide casi 1,90 metro y lo apodan "Oso". Su posición de delantero surgió más por vocación que por convicción. "Yo jugaba de doble 5 en Cambaceres, pero como cada vez que me iba al ataque no volvía a marcar, un entrenador de juveniles decidió ponerme de 9 y ahí quedé". Martín Palermo lo llevó a probarse a Boca en 2004. Cuenta que La Plata es su lugar en el mundo y la elegancia nunca fue su fuerte. Pasó por Cambaceres, Boca, Tigre, el fútbol noruego, Unión, Universidad Católica, Genoa de Italia, tuvo un fructífero paso por Vélez y ahora se destaca en Brasil. "Al no jugar en Europa todo cuesta más. Por eso la llegada de un técnico como el Patón, que mira para este lado, nos da esperanza a los que jugamos en Sudamérica", confesó. Feliz porque llegó su momento.

Fuente Cancha Llena