Vistas de página en total

martes, 16 de junio de 2015

La Pellegrinación




Pellegrino llegó a Domínico pasadas las 7 y se retiró a las 15.30. Arrancó el ciclo con muchas ganas.

Por Fabian Rodriguez

Mauricio Pellegrino tuvo su primer día al frente del Rojo y llenó de fe al plantel, integrado por 33 jugadores. La pretemporada se hará en Luján, cuna de los fieles.

No se come, pero alimenta”. Esa fue la definición del término “ilusión” que escribió Gabriel García Márquez. Ese sentimiento afloró en el plantel de Independiente con la asunción de Mauricio Pellegrino. Entre el viento incesante que ayer azotó en Villa Domínico se filtró una brisa de esperanza que emanó desde los jugadores. Hoy, existe confianza para lograr resultados positivos y dejar atrás el calvario vivido en el pasado, en los últimos partidos del ciclo de Jorge Almirón que alejó al Rojo de la lucha por el torneo local. La décimosexta posición pretende ser revertida y, a la vez, se espera avanzar y dar pelea en la Copa Argentina y la Copa Sudamericana.

El ciclo del Flaco se inició ayer a las 9.30, cuando Jorge Damiani, secretario deportivo del club, realizó la presentación formal en el vestuario. Un rato después, Pellegrino llevó a cabo una charla de media hora con sus dirigidos en plena cancha, ante la presencia de Carlos Compagnucci y Xavi Tamarit (ayudantes de campo), Gabriel Macaya (preparador físico) y Pablo Cavallero (entrenador de arqueros). Luego, llegó el momento de la acción de los futbolistas...

Ejercicios aeróbicos y con pelota integraron la rutina para los 32 jugadores en condiciones aptas, ya que Torito Rodríguez hizo tareas de rehabilitación por la fractura de peroné en la pierna izquierda que sufrió el 11 de abril en el Bajo Flores. Una vez que culminó la primera práctica, Longaniza y sus colaboradores se retiraron hacia la confitería del predio para dialogar con Fernando Berón, técnico de la Reserva, y algunos entrenadores de las Inferiores. La intención es trabajar de manera mancomunada. Pasadas las 15.30, se retiró del predio, completando más de ocho horas en el predio, ya que llegó pasadas las 7.

La conformación del plantel es la principal cuestión que debe resolver. De los 33 jugadores que se presentaron ayer se irán cuatro, en primera instancia. La directiva determinó que no renovará los contratos de Cristian Tula y Gabriel Vallés, que terminarán el 30 de junio. Además, Gabriel Graciani (lo dirigió en Estudiantes y no lo tuvo en cuenta en 2014) y José Valencia seguirán sus carreras en otros clubes. Cabe destacar que la intención del DT es trabajar con 28 jugadores. Para llegar a esa cifra, debe definir la continuidad de Lucas Villalba, Alexis Zárate y Rafael Barrios. Lo mismo sucede con la situación de Javier Báez, quien volvió al club tras el préstamo por una temporada en Deportes Iquique de Chile, y será evaluado durante la pretemporada.

En cuanto a la llegada de refuerzos, Pellegrino fue contundente: quiere a Germán Denis. Es su obsesión para juntarlo con Lucas Albertengo. La negociación con el enviado de Atalanta es compleja porque el jugador cuenta con dos años más de contrato. El resto de las incorporaciones dependerá de las transferencias al exterior que realice el club. Los apuntados a vender son Federico Mancuello, Matías Pisano y Víctor Cuesta, aunque por ahora no llegaron propuestas concretas.

“La Pellegrinación”, el proceso que transita Independiente, comenzó la semana pasada y ya da signos de transformación. En cuanto al plantel, el entrenador estableció una nueva matriz para el trabajo diario. La primera idea base la importó de Europa, donde jugó ocho años. Tras los entrenamientos, los jugadores compartirán el almuerzo en Domínico. Una acción que apunta a controlar la alimentación, a través de una dieta estricta, y que también busca afianzar la unión grupal mediante las sucesivas reuniones al mediodía.

El otro punto que impuso el entrenador fue la confección de un tablero de 12 por 12 en la cancha n° 2, compuesto por cuadrados de un metro para desarrollar el Yo-yo test, un método para medir la oxigenación y resistencia a través de carreras de ida y vuelta, a una velocidad que aumenta de manera progresiva por intermedio de una señal sonora. El objetivo es lograr medir el agotamiento físico.

La actualidad del Rojo es pura ilusión. Esta semana continuará los trabajos en Villa Domínico y a partir del lunes que viene trabajarán en Luján. Sí, en la ciudad de la Basílica, donde los Pellegrinos de la fe intentarán conseguir la puesta a punto física y futbolística.


Fuente Olé

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.