Gallego: “Tanto 4-4-2 está matando al fútbol argentino”

Por Fernando Gourovich - Waldemar Iglesias

Crítico de la actualidad, el entrenador afirma: “Se juega muy recio, cada pelota es a vida o muerte. No veo gambeteadores, no veo enganches como Bochini o como Riquelme”.

" ¿Cómo me pongo? ¿Así está bien? ¿Adónde miro? Vos decíme porque ya me había desacostumbrado a posar para las fotos. Pasa que estuve un año afuera del fútbol. ¡Un año congelado! En ese tiempo no hablé con ningún periodista. Me desconecté de todo. Sabés que bravo es eso, hay que bancársela. Me comí todos los partidos, de la A, de la B, de la C. ¡Todos! Ya no me aguantaba más y en casa tampoco me soportaban más. Además, hay que alimentar a la familia”

Volvió al ruedo Américo Rubén Gallego. Está feliz, por reinsertarse nuevamente en su hábitat natural y porque “todavía estoy invicto, ja”

Ese estado de ánimo se advierte en cada una de sus expresiones, en cada una de las palabras que le dice a Clarín . Un poco por deseo propio y otro por falta de propuestas interesantes, se tomó un año y doce días sabáticos. Su última experiencia fue del otro lado de la Cordillera, en el Colo Colo chileno. 

Pudo haber arribado antes a este Independiente maltrecho, necesitado. 

Pero, cuando Javier Cantero lo fue a buscar para suceder a Ramón Díaz, dijo que no, que no era su momento, que fue una decisión tomada a conciencia. 

Ahora, a medio año de ese no, su corazón le dijo sí.

-¿Qué viste este largo año desde afuera?

-Lo que más me llamó la atención es el nerviosismo en la gente. No se puede creer la histeria que hay si no conseguís un resultado. Eso perjudica a los jugadores. No hay paciencia, enseguida bajan los insultos. Y afuera se puso más bravo ...

-¿Te preocupa la violencia que hay en las tribunas?

-Sí, no podemos seguir así. Salís de tu casa para ir a la cancha y no sabés si volvés. Es feo decirlo, pero es así. Está todo muy complicado. Todos deberíamos frenar un poco la cosa. En todos los estadios se corre peligro. Eso no quiero para el fútbol, quiero que vuelvan las fiestas a las canchas. Antes, en mi época de jugador, esto no pasaba. Jugábamos siempre a cancha llena.

-Y puntualmente en cuanto a lo futbolístico, ¿cuál es tu análisis?

-Se juega muy recio, cada pelota es vida o muerte. Hay muchos lastimados. Mucho roce y poco fútbol. No veo gambeteadores, la mayoría elige jugar con un 4-4-2, no veo enganches como Bochini o como Riquelme. Tanto 4-4-2 está matando al fútbol argentino. Yo de mi parte, arrancaré con uno o dos enganches. Después veremos cómo resulta.

-Precisamente, la salida abrupta de Riquelme acható todo aún más, ¿no?

-Sí, sin dudas. La salida de Román es muy triste para el fútbol argentino. Los goles que hacía, los que hacía hacer. Tenía un carisma único. Pero bueno, fue una decisión de él. Yo lo quiero ver en otro equipo jugando. Dios quiera que vuelva a jugar, que se ponga las pilas para que la gente pueda disfrutarlo unos años más. Es un jugadorazo.

Los primeros instantes del tercer episodio del Tolo en Independiente fueron extremadamente vertiginosos. No paró ni un minuto. Arrancó embalado. Y, mientras le presta atención a todos los flancos, en Villa Domínico le entrega a Clarín un minucioso diagnóstico referido al equipo que agarró.

“Tenemos un buen plantel, algo golpeado por las lesiones y por cuestiones físicas. Igual, acá no hay excusas. Hay buenos jugadores, experimentados. Ya hablé bastante con Tuzzio y con Morel. Pero ojo, a los pibes también les dije que se pongan las pilas. Muchos ya me tuvieron y saben que conmigo va a jugar el que esté mejor”.

-Descomprimió la clasificación ante Boca, pero por el torneo local hace 10 partidos que no ganan.

-Sí, es cierto. Arrancamos con el pie derecho. Para mí ya se produjo el click en la cabeza de los jugadores. Acá no hay misterios, hay que empezar a ganar. Yo lo tengo muy claro, si acá no ganás, sos boleta. Pero eso no me hará resignar mi forma de jugar. Vamos a ir al frente en todos lados. El campeonato lo vamos a pelear a muerte.

-Con tu llegada, inmediatamente, se callaron los insultos y los reclamos. Encima, si bien el equipo no ganó, clasificó dejando en el camino a Boca. ¿Sos una especie de mago?

-No, no soy mago. Pasa que acá gané un campeonato después de mucho tiempo y en la etapa anterior peleamos dos veces hasta el final. La gente de Independiente me tiene mucho cariño. Es mutuo.

-¿Qué metas aparecen en lo inmediato?

-No me pongo metas, quiero pelear arriba y avanzar en la Sudamericana. No sé si tendré un cuarto capítulo. Por eso tengo que dejar la vida por estos colores.

Está claro: Américo Rubén Gallego está de vuelta.

Fuente Clarín