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martes, 16 de octubre de 2012

Messi, perseguido por los hinchas... y por la seguridad




Desde su llegada a Chile, y como en cada lugar que visita, la Pulga es el gran foco de atención; simpatizantes, periodistas y hasta sus custodios luchan por un lugar a su lado; accedé al video
         

 A Leo lo marcan en todos lados


Por Jeremías Prevosti / Enviado especial 

SANTIAGO DE CHILE.- Termina la conferencia de prensa de Alejandro Sabella, entrenador del seleccionado argentino, y los empleados de seguridad del Estadio Nacional se apresuran para desalojar a los periodistas. La práctica se programó a puertas cerradas y algún curioso cerca puede romper la tranquila tarde, decorada por un sol que, poco a poco, se refugia tras las montañas.

Los gritos vienen del exterior. No hay dudas: llegan los jugadores. El paso se acelera. Las corridas cubren los pasillos. A los custodios del seleccionado, que los acompañan desde su llegada a Santiago de Chile, los invade el nerviosismo. El micro de dos pisos que traslada al equipo abre sus puertas. Empieza la cuenta regresiva. Los hinchas toman aire. Se vienen las estrellas.



Uno a uno, en silencio, sin romper la hilera india y sin custodia (los hinchas están muy lejos de la escena), empiezan a bajar los jugadores. Pasa Sergio Romero, siempre con una inagotable sonrisa. Luego, Gonzalo Higuaín, Sergio Agüero, Ángel Di María. Todos. Todos menos uno: Lionel Messi, el más esperado.

Tarda en bajar. La espera se convierte en una ola de desolación. Está cerca. Está lejos. Pero esa desolación se trasforma en euforia. Primero se asoman los botines, que los trae en las manos. Después, con la inocencia reflejada en su rostro, Messi se deja ver. Rápidamente y con más deseos de acercarse que de protegerlo, cuatro guardias corren en su encuentro. Los rodean. Está seguro. ¿De quién? De ellos mismos. Lionel Messi ya es una leyenda y, por mucho tiempo, los hinchas no se agotarán de perseguirlo. Los custodios tampoco.


La práctica, como siempre sucede en la previa a un partido de la selección, fue a puertas cerradas. Los jugadores hicieron reconocimiento del campo de juego y realizaron algunos movimientos. Por su parte, Rojo se entrenó diferenciado y quedó descartado para jugar ante Chile (lo reemplazaría Campagnaro).


Fuente Cancha Llena

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