Los padres retiran a sus hijos del colegio de Independiente.
Luego, regresó la calma. (Jorge Sánchez)
Javier Cantero, presi de Independiente, se refirió a las
amenazas de bomba que sufrió la escuela del Rojo y responsabilizó a la barra.
“Fue un hecho desgraciado. Nos enteramos y llamamos a la
Policía para que hagan una inspección profunda. No podíamos correr riesgos.
Pensamos que no pasó nada, que nos quieren poner un poco de miedo por la
movilización política…”.
Javier Cantero, presidente de Independiente, fue clarito en
diálogo con La Red.
Su manera de explicar la amenaza de bomba sobre el colegio
de Independiente tenía un único responsable (la barra) y un único móvil:
amedrentar a los socios genuinos que pensaban autoconvocarse este viernes desde
las 19 en las puertas de la sede social para darle apoyo a esta conducción.
Además, durante el mediodía, se confirmó que los violentos no concurrirían a la
cita para no echar más nafta al fuego.
“Dicen que yo estoy de paso y que ellos van a estar siempre
arriba del para avalanchas. Cuando ellos no habían nacido yo ya veía los goles
de Bernao. La fiesta del fútbol es preexistente a los barras. Pero, que haya
temor, es lógico. Por suerte, el apoyo de Julio Grondona fue fuerte. Lo noté
muy sincero”, agregó el mandamás que sucedió a Julio Comparada.
“Destapé una olla. Los barras no son hinchas del club sino
militantes de la política. Jamás les dí entradas. Necesito que los socios me
acompañen. Si hay dos derrotas deportivas a lo mejor la gente cambia el humor.
A lo mejor dice ‘es preferible que esté la barra y ganar…’ Pero voy a seguir
con esto porque no es un problema de Cantero. Es un problema que tienen más de
50.000 socios”.
Fuente Olé
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