Quieren irse de Independiente; el uruguayo fue tentado por
Lanús, al cordobés lo busca River mientras que por el central aún no hay nada
Por Diego Rodia
A comienzos de año, Diego Rodríguez, quien se fue bajo la
resistencia del hincha, advirtió que “son muchos los muchachos que se quieren
ir, no sólo yo”. En ese momento, la sensación de la gente de Independiente era
unánime: lo utiliza como excusa para que nadie hable de él. Pero el tiempo
suele ser testigo de las cosas y parece querer darle la razón al Ruso.
Es que
son varios los que pretenden seguir los pasos de Hernán Pellerano y Jorge
Ortiz, los dos referentes “borrados” por Ariel Holan.
Emiliano Rigoni, Diego Vera y Víctor Cuesta no están cómodos
en el Diablo. Sienten que están viviendo, paradójicamente, en un Infierno. Por
algo, el cordobés está mal porque Independiente no aceptó el ofrecimiento de
Atalanta y aclaró que en el fútbol local no lo transfiere. Esto viene a cuento
del deseo de River de llevárselo, situación que le iluminó los ojos al jugador
y a su representante Juan Cruz Ollier.
El caso Vera genera más bronca en Avellaneda. La dirigencia
se cansó de que Lanús y su técnico lo llamen por teléfono para convencerlo de
que se vista de granate. El uruguayo quiere que lo dirija Jorge Almirón pero en
avenida Mitre 470 aseguraron que sólo lo largan por 2.500.000 de dólares, pero
no a préstamo. Igual hay bronca porque Lanús ya le ofreció un contrato más
importante que el que tiene en Independiente.
Por último, Cuesta está dispuesto a irse. El tema es que no
hay ofertas por él, aunque en las últimas horas también lo habría sondeado el
Grana. Ya manifestó su intención el día de la vuelta al trabajo, cuando habló
en conferencia. Y Holan, que lo vio jugar con desgano contra Riestra y Racing,
evalúa sacarlo del primer equipo en el clásico de Mardel.
Por las dudas, que
alguien ponga en el club la frase: “El último que apague la luz”
Fuente Don Balón
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