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La suspensión del partido ante Unión generó fastidio en el
plantel, que ayer se entrenó en Domínico.
El fastidio se percibe con facilidad en el predio de Villa
Domínico.
Los gestos son elocuentes y delatan la bronca que invadió a los
jugadores de Independiente tras la suspensión del partido ante Unión.
El
plantel del Rojo volvió a entrenarse ayer por la mañana y, para evitar que sus
jugadores pierdan el ritmo, Omar De Felippe dispuso una práctica de fútbol.
En
el ensayo, el DT paró el equipo que iba a enfrentar al Tatengue: Diego
Rodríguez; Núñez, Cáceres, Morel Rodríguez, Mancuello; Pisano, Zapata,
Razzotti, Trejo; Montenegro y Parra.
El otro equipo estuvo conformado por
Navarro; Muñoz, Villagra, Delmonte, Barcia; Cristian Ortíz, Monserrat, Bellocq,
Franzino; Penco y Adrián Fernández. Por su parte, Cristian Tula, quien arrastra
una tendinitis aquiliana, trabajó en forma diferenciada al igual que Julián
Velázquez, que se está recuperando de un desgarro. Ambos llegarían al partido
frente a Almirante Brown.
Fuente Olé
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