La Seguridad otra vez en alerta por la interna barra del
Rojo. Loquillo, Bebote y Zombie disputan el poder.
Otra vez hay máxima tensión en la barra del Rojo.
Por Gustavo Grabia
En julio de este año parecía que se terminaba la interna en
la barra de Independiente: Bebote Alvarez se bajaba del paravalanchas aunque
seguía manteniendo poder a través del Tano de Gerli, (nuevo capo que le
responde), y quien se le había rebelado, su segundo hasta entonces, Marcelo Zombie
Cano, también quedaba fuera junto a su grupo de la Villa 21 y del barrio de
Villegas, que responde al histórico Walter Coco Linardi, hoy en prisión.
Pero
la paz duró poco y otras vez están sonando los tambores de guerra: por un lado,
Cano está armando un nuevo grupo con Matías Soto, alias el Polaquito, hincha
del Rojo que intentó quedarse a punta de pistola con la barra de Lanús y
perdió, y el que también movió sus fichas en los dos últimos meses y armó otra
facción es César Loquillo Rodríguez, ex jefe que perdió la tribuna justamente
con Bebote, y que reunió ahora gente del Docke, Quilmes y Florencio Varela más
los del barrio 4 de Julio de Avellaneda y tendría la banca de Cristian Chichón
Ojeda, otro que pesa fuerte en el Libertadores de América desde hace mucho
tiempo.
Los tres bandos están decididos a todo y la Seguridad ya está en
alerta: hubo reuniones por separado de funcionarios bonaerenses con cada uno de
los referentes para que lo que tengan que resolver lo hagan fuera de la cancha.
Y si bien los barras acataron esto tras la amenaza de que caso contrario van
todos presos, y mucho más tan cerca del ballottage, más vale prevenir que curar
y el operativo policial ante Vélez este domingo fue reforzado con 120 policías
más.
Fuente Olé
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