Mancuello volvió a ser la figura de Independiente. Esta vez
convirtió un gol y medio: el primero lo marcó de zurda y en el segundo probó el
olímpico, pero Zárate la empujó sobre la línea.
Cada día está mejor. Federico Mancuello ya es la figura de
este Independiente. Volvió a demostrarlo en Mendoza, en otra noche de fútbol y
goles. El volante convirtió su octavo grito en el torneo -es decir, alcanzó al
goleador Teófilo Gutiérrez-. Pero eso no es todo. Lleva siete gritos
consecutivos. "Pudimos rescatar un punto. Era una oportunidad linda para
ponernos a uno de River. Pero analizando el partido, sirve el punto,
demostramos carácter", dijo en el final.
En realidad, Mancuello metió un gol y medio en Mendoza.
Porque además del zurdazo del empate parcial, fue casi el autor del 2-2. Un
córner que se metía fue apenas cabeceado por Zárate. "El arquero me había
atajado una pelota antes. Entonces, le dije al juez de línea que iba a probar
al arco. Busqué el olímpico. Igual, no importa quién haga los goles. Lo
importante es sumar", agregó quien lleva en este campeonato más gritos que
en los 101 partidos que había jugado con la camiseta de Independiente.
Fuente Olé
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