“River está un
escalón por encima del resto, pero nosotros vamos a pelear hasta el final”,
aseguró el delantero.
Por Favio Verona
Lucero cree que están pagando el precio de no salir
concentrados. “No nos debe seguir pasando”, dijo.
Fue la principal apuesta de Independiente. Los 24 goles que
había convertido en Defensa despertaron el interés del Rojo, pero a Juan Martín
Lucero pareció amedrentarlo el contexto. Dilapidó varias oportunidades y perdió
el puesto, aunque entró el lunes ante Godoy Cruz y la certeza de que Riaño está
padeciendo la falta de un acompañante podría abrirle las puertas del equipo.
“No estoy conforme con mi rendimiento, aspiraba a más. Me está costando
adaptarme y hasta el momento no pude encontrarle la vuelta”, le comentó el
punta de 22 años a Olé .
-¿Por qué no pudiste sostener el nivel que alcanzaste en Defensa?
-Fue un cambio abrupto para mí pasar a un grande. La
transferencia me tomó por sorpresa y no es fácil adaptarse a un club con tanta
repercusión. Acá la presión es mayor y hay que aprender a manejarla, a tomar
las cosas con tranquilidad. Sé que tengo que volver a mi nivel porque no me van
a esperar si no la empiezo a meter.
-¿Te sentís presionado por no poder convertir desde la
primera fecha?
-Preciso un gol para soltarme. Sé que cuando haga uno se me
va a abrir el arco. Uno se pone impaciente y nervioso cuando no tiene
situaciones. Ahí es cuando te matan las dudas y te empezás a preguntar si te
estás moviendo bien o no, si te estás desmarcando... A pesar de todo estoy
tranquilo porque tuve chances de gol en las que fallé. Y la puntería se puede mejorar.
-Mencionaste que no estás conforme con tu nivel. ¿El equipo
también está lejos del juego que pretende desarrollar?
-Hubo lapsos de buen juego, pero aún nos falta. Nos está
costando mantener la intensidad durante los noventa minutos y eso es lo que nos
reclama Almirón.
-¿Por qué en los últimos dos partidos el equipo no salió a
presionar con determinación como ante Rosario Central?
-Tanto el partido contra Estudiantes como el de Godoy Cruz
fueron raros porque el equipo entró dormido. Sabíamos que ambos eran rivales
que juegan bien si los dejás. Nos faltó presionarlos más en todas las líneas.
Nuestro error fue dejarlos jugar porque nos lastimaron. Con el correr de los
minutos fuimos ajustando las marcas, pero no podemos entrar dormidos y permitir
que el rival se agrande. Eso no nos puede seguir pasando.
-Ese es un síntoma de un equipo inmaduro...
-No sé si inmaduro, pero somos un equipo en formación.
Estamos en la búsqueda del equilibrio.
-¿Ultimamente el temor al desequilibrio les jugó una mala
pasada?
-Estudiantes y Godoy Cruz salieron como nosotros lo habíamos
hecho ante Central y nos costó acomodarnos. Te repito: entramos dormidos.
Sabemos que tenemos que estar mejor parados en defensa, pero sin resignar peso
ofensivo. La idea es defendernos con la pelota, como hicimos con Central.
-¿Cuál es el verdadero Independiente?
-Tenemos que ser el equipo agresivo que no duda en salir a
presionar, atacar, e ir a buscar los partidos con decisión desde el primer
minuto. El que se vio contra Rafaela y Central.
-Ya pasaron 10 fechas, ¿para qué están?
-River está un escalón por encima del resto y Lanús juega
muy bien. Nosotros no hemos jugado todos los partidos como queremos, pero
tuvimos el mérito de mostrar personalidad para no caernos cuando nos golpearon.
Y eso demuestra que vamos a pelear hasta el final.
Fuente Olé
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