La familia unida

Holan tiene su propia hinchada que lo sigue a todas partes: su círculo íntimo fue a la presentación y, como son fanáticos del Diablo, le pidieron un equipo ganador. 

Alessandro, Sofía, Carla, Juan Cruz, Agustín, Melanie, Silvina y Felipe estuvieron con Olé (HEVA).

Por Fabian Rodriguez y Favio Verona

Miradas de plena felicidad y sonrisas de orgullo. Parecen incrédulos, como si atravesaran un momento mágico y único. Este grupo está en el fondo de la sala de conferencia de prensa del Libertadores de América. Se ubican entre cámaras de televisión, grabadores, la inquietud de los productores que los gambetean y muchísimos cables. “ ¿Quiénes son? ”, pregunta un camarógrafo. “ Dejaron entrar a algunos hinchas ”, responde un colega sin conocimiento de causa. Pero ellos están ahí, felices por este momento que quedará eternamente en su corazón y en las imágenes que capturan sus celulares. Y la emoción los supera, alcanza el borde de sus pupilas. No les permite percibir lo que ocurre a su alrededor, como el calor infernal que reina en ese espacio cerrado, sin ventilación y un pequeño aire acondicionado para intentar aplacar los 30° que amenazan con subir al igual que los latidos, cuando Ariel Holan ingresa a la sala junto a Hugo Moyano para ser presentado como técnico del Rojo.

Pasado el mediodía, los flashes se apoderaron de la escena que tuvo como protagonistas principales al técnico y el presidente. Y ahí estuvo su hinchada para alentarlo y acompañarlo en este sueño, su gran sueño. Fue más local que nunca porque lo acompañaron Carla (esposa), Sofía y Melanie (hijas), Felipe (nieto) Alessandro y Agustín (yernos), Silvina (hermana) y Juan Cruz (sobrino). La gran mayoría hinchas de Independiente, al igual que el nuevo entrenador.

“Es muy emocionante lo que estamos viviendo. El se preparó toda su vida para esto. Venimos siguiendo el esfuerzo, la dedicación y el compromiso que viene desarrollando para progresar. Y como es hincha de Independiente, al igual que toda la familia, para nosotros es más que un sueño”, describió Alessandro Salerno, pareja de Sofía. Y vaya que Holan se esforzó para cumplir este gran anhelo que le llegó a los 56 años. Arrancó en el hockey sobre césped, luego trabajó como asistente de Jorge Burruchaga y Matías Almeyda, tuvo un breve paso por las Inferiores de Argentinos y dirigió a Defensa y Justicia.

“Es un apasionado”, resalta Sofía. Una condición que le permitió hacerse un lugar en un ámbito cerrado, en el que debió superar el prejuicio por no haber jugado al fútbol de manera profesional. Y lo logró a través de su método de superación, que fue el combustible que lo trasladó hasta Independiente. Pero antes de conseguirlo, él y su familia tuvieron que superar una etapa de incertidumbre por la diversidad de candidatos al puesto. “Vivimos con muchos nervios el proceso anterior a que sea nombrado en el puesto. Le transmitimos todo lo que sabíamos, lo que leíamos en la web y escuchábamos en la radio y la televisión. Además, le avisábamos que ganaba en todas las encuestas”, explicó una de sus hijas. Este proceso también lo vivió uno de sus yernos, Agustín, quien así se lo explicó a Olé : “En el trabajo estaba pendiente de lo que se publicaba en Twitter y en Internet. Me la pasaba refrescando para ver las últimas noticias. La verdad es que nos la pasamos cortando clavos”.

El cierre del año trajo este gran regalo para los Holan, Ariel dirigirá el club de la familia. Y tendrá un compromiso doble, para cumplir el deseo en 2017: “¡Que gane todo!”.

Fuente Olé