Por Lucas Campos
- ¿Qué andás haciendo amigo?
Me preguntó, vía mensaje, un amigo al que nada le interesa
sobre el fútbol. Y yo le expliqué que estaba observando como el Torito
Rodríguez se cansaba de errar goles abajo del arco y como estafaban a
Independiente con un penal más injusto que la propia injusticia.
Independiente ya había levantado las manos a un cielo mendocino
que nos odia desde 1969 y en el cual el Rojo siempre hace agua.
E hicimos agua nomás. No alcanzó que el Toro quede debajo de
los tres palos 3 veces, ni que Fernández haya pateado de zurda ni que Benítez
intente gambetear.
Sumado a la mala racha que se intensifica con el mal juego,
Loustau, con una rabia increíble, pitó penal. Y fue el Morro García y lo cambió
por gol. Y ese gol significó otra caída en Mendoza. Otra caída del fútbol, otra
vez la bronca y otra vez la desilusión.
Un ole a la victoria, un ole a la justicia, un ole a la
definición de goles y un ole al año 1969. Me preocupa que el ole, se traslade
al ole de la Sudamericana.
Aferrate a la Copa Rojo, aferrate.
Fuente De la Cuna al Infierno
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