La historia del Rojo ante equipos venezolanos

Por Santiago Demartino

Independiente jugó siete veces en su historia con equipos de Venezuela, siempre por Copa Libertadores. El dato alentador es que en Avellaneda ganó los tres partidos que jugó, marcó diez goles y no recibió ninguno. Este jueves desde las 21.30 buscará ganarle a Deportivo Lara para meterse en los octavos de final de la Copa Libertadores 2018.

#1 Copa Libertadores 1987 – Fase de Grupos

Durante muchos años, los grupos de la copa fueron conformados por dos equipos de dos confederaciones. En esta edición, al Rojo le tocó compartir zona con Rosario Central y dos venezolanos: Deportivo Táchira y Estudiantes de Mérida.

Los primeros dos partidos del Rey de Copas fueron en Venezuela. Derrota 3-2 con Táchira y triunfo 1-0 en Mérida. Con un 0-0 de por medio en el Gigante de Arroyito, el Rojo tuvo que recibir a los dos venezolanos en la Doble Visera. Primero le ganó 2-0 a Estudiantes y luego goleó 5-0 a Táchira. Con estos resultados, el Rojo recibió a Central obligado a ganar para pasar de ronda. Fue 3-1 en Avellaneda y clasificación a semifinales, instancia en la que quedó eliminado por Peñarol y River.

#2 Copa Libertadores 1990 – Octavos de Final

Después de finalizar primero en un grupo de dos participantes (los equipos colombianos se habían bajado de la competencia por violencia en su campeonato nacional), Independiente tuvo que enfrentar en octavos de final a Pepeganga, que había finalizado tercero en el grupo que compartió con Defensor Sporting, Progreso y Mineros de Guayana. La particularidad en ese grupo fue que Pepeganga ganó sus tres partidos como local: 1-0 ante los dos uruguayos y 2-1 ante su par venezolano.

Sin embargo, el Rojo arrasó con esa fortaleza que parecía haberse construído en la ciudad de San Cristóbal: goleó 6-0 al local y una semana después ratificó su superioridad con un 3-0 en Avellaneda. Luego, en cuartos de final, Independiente no pudo con River y quedó eliminado.

#3 Copa Libertadores 2018 – Fase de Grupos

Tras siete años el Rey de Copas volvía a disputar la Libertadores en un grupo que, a priori, tenía dos rivales complicados y uno accesible. En la primera fecha a Independiente le tocó visitar a Deportivo Lara, que parecía el más débil de los cuatro integrantes del Grupo 7. Los locales sorprendieron con un gol a los diez minutos de juego y luego cuidaron muy bien el resultado. El Rojo, por su parte, no tuvo su mejor noche y no mereció igualar el marcador. Fue derrota y baldazo de agua fría para los dirigidos por Ariel Holan, que definirán el pase a octavos justamente ante este rival.

Fuente Orgullo Rojo