Las pruebas apuntan a “una coima” y a una empresa de
Alejandro Burzaco y los Jinkis. Reunión en Tribunales y en Casa de Gobierno
para renegociar el dinero para la supervivencia de la AFA
En la grave crisis institucional de la Asociación de Fútbol
Argentino, la reunión que se llevará a cabo esta tarde a las 15 horas en el
despacho de la jueza María Romilda Servini en los Tribunales es el menor de los
problemas. La magistrada tiene su mirada puesta en un problema quizás mucho más
complejo: los vínculos entre el aparente despilfarro de los seis mil millones
de pesos del Fútbol para Todos y el megaescándalo del FIFA Gate.
Fuentes judiciales confirmaron a Infobae que la titular del
Juzgado Federal N°1 de Comodoro Py retomará esta pista en los próximos días.
Hay pruebas que la magistrada cree de suma importancia. Voces cercanas al
expediente hablan de la existencia de "una coima" y señalan como involucrada
a la firma Datisa S.A, una empresa de Alejandro Burzaco y Hugo y Mariano
Jinkis.
Datisa, con sede en Montevideo, tuvo un rol protagónico en
el escándalo de corrupción que sacudió a la máxima jerarquía del fútbol
mundial: había logrado los jugosos derechos de patrocinio y transmisión de la
Copa América Centenario 2016.
El negocio iba mucho más allá. La CONMEBOL le
había vendido a Datisa los derechos de cuatro ediciones de la Copa América
(Chile 2015, Centenario 2016, 2019 y 2023), firmando un contrato el 25 de mayo
de 2014 en Londres a cambio de casi 320 millones de dólares. 75 millones se
pagaron por la edición 2015; 77,5 millones por la 2016; 80 millones por la de
2019 y 85 millones por la de 2023.
En octubre del año pasado, CONMEBOL emitió un comunicado para
anunciar que el vínculo para Datisa con respecto a la Copa América 2016 quedaba
rescindido. La Justicia estadounidense sospechó un arreglo de coimas colectivo
por más de 100 millones de dólares para este acuerdo. Julio Grondona, ya
muerto, fue acusado de llevarse 3 millones.
La vinculación entre la ruta del dinero de la Jefatura de
Gabinete kirchnerista del Fútbol para Todos no es algo nuevo, en cierta forma,
sino un asunto caliente que quedó en stand by. En septiembre pasado, el Juzgado
Federal N°1 libró un oficio al escritorio del juez Raymond Dearie Justicia de
New York para anoticiarlo de la existencia de la causa que en ese momento
comenzaba a instruir.
De vuelta a la calle Talcahuano, la magistrada se apresta a
recibir al fiscal Eduardo Taiano y a los veedores Alberto Piotti, Alicia López
y Horacio della Rocca, encargados de instruír el expediente del FPT, al Comité
Ejecutivo de la AFA, a miembros de la Secretaría General de Presidencia como el
secretario Fernando de Andreis y Fernando Marín, hoy a cargo del programa
Fútbol para Todos y a miembros de la Inspección General de Justicia. Gianni
Infantino, actual cabeza de la AFA, fue invitado, aunque no será de la partida.
La actual acefalía de la AFA es la principal preocupación de
Servini. La jueza no tiene potestad para definir al sucesor de Luis Segura,
presente hoy en la reunión en Talcahuano, pero sí puede sugerirlo. Todo esto,
de cara a la Comisión regularizadora encabezada por el dirigente de Ituzaingó
Damián Dupiellet, que no entró en vigor. Entre los integrantes de la reunión no
hay temor a desafiliación de la FIFA, por otra parte. En todo caso, se habla de
una "exhortación" de la jueza para ordenar los asuntos en Viamonte
1366.
Con respecto a un encuentro cara a cara entre Servini y la
FIFA, fuentes cercanas a la jueza hablan de una reunión que ocurriría la semana
próxima en Comodoro Py con el enviado de la FIFA, Gianni Crovaro. De esa
reunión, puede surgir la designación de un "nexo observador" de parte
de la Justicia para recibir información de cara a la gestión de la Comisión
regularizadora, que por estatuto de la FIFA debe incluír de 5 a 7 miembros, con
un mandato máximo hasta junio del año próximo. Con esta comisión, los mandos de
la AFA quedarían abolidos, con un llamado a elecciones como opción lógica.
Mientras tanto, en Casa Rosada, una reunión más urgente
ocurrió esta mañana: el encuentro en Casa de Gobierno entre De Andreis y Marín
con jefes de la AFA como Daniel Angelici y Claudio "Chiqui" Tapia. La
meta: renegociar la plata del Fútbol para Todos, la línea de dinero que es la
base de la supervivencia de la AFA. Una fuente cercana a la Asociación desliza:
"Sin eso, en Viamonte no hay ni para pagar la luz".
Tapia negó que se hablase de dinero, pero Marín fue más
positivo al salir de la cita: anunció una inyección masiva de 2500 millones de
pesos del Ejecutivo. Todo esto, mientras Servini inicia una nueva fase en su
causa, en donde busca investigar a los presidentes y tesoreros de los clubes
afiliados a la AFA por al menos $218 millones de pesos estatales que nunca
llegaron a sus arcas.
Fuente Play Fútbol