Tras la eliminación en la Copa Libertadores, el Rojo se
enfocará en la Superliga. El Profesor buscará elevar a un equipo que sufrió un
bajón durante 2018.
EFE/Juan Ignacio Roncoroni
Por Fabián Rodriguez
El sueño de conseguir la octava Copa Libertadores se terminó
en Núñez. Allí, en el estadio de River, Independiente no pudo meterse en la
semifinal del torneo más importante del continente. Ahora llegó el momento de
enfocarse en la Superliga, de recuperar el terreno perdido. Para Ariel Holan y
sus futbolistas es tiempo de fortalecer un equipo que, a lo largo del año, tuvo
altibajos en el funcionamiento, sufrió la pérdida de jugadores clave
(Tagliafico, Barco y Torito Rodríguez) y, salvo Silvio Romero, los refuerzos no
estuvieron a la altura. Razones suficientes para que sólo en algunos pasajes y
en unos pocos partidos, esta versión logre acercarse al conjunto que obtuvo la
Copa Sudamericana en el Maracaná, en diciembre.
En estos últimas meses del 2018, el Rojo afrontará nueve
partidos que le servirán para escalar posiciones y tratar de achicar la
distancia con Racing, actual puntero del campeonato, que le lleva 12 los
puntos. Si bien tiene un partido pendiente frente a San Martín de Tucumán,
correspondiente a la primera fecha, el Profesor es consciente del flojo
arranque debido a que no encontró la manera de mantener la consistencia del
equipo cada vez que introdujo variantes por el desgaste que implicó afrontar
cuatro competencias en el semestre: Libertadores, Superliga, Suruga Bank y Copa
Argentina.Y también a que algunos refuerzos no aportaron soluciones.
Mirá también: Qué hizo el juez, qué le dijeron del VAR, qué
hizo Ponzio
Holan quiere llegar a la mitad del torneo en una posición
expectante, hoy se ubica decimocuarto. Tendrá que sacar la mayor cantidad
posible de los 27 que quedan en juego, para luego no tener que sumar con
desesperación rumbo a la clasificación a las copas de 2020. Por ahora, tiene
asegurada la plaza en la Sudamericana 2019 y conserva chances de ingresar a la
Libertadores, dependerá que Boca y/o San Lorenzo conquisten la Libertadores y
la Copa Argentina, respectivamente.
Patronato, Huracán, Atlético Tucumán, Argentinos, Belgrano,
Lanús, Boca, Godoy Cruz y San Martín de Tucumán (pendiente de la primera
fecha), integran la recta final del Rojo, que servirá para evaluar a un plantel
costoso. Ante la devaluación del peso y en el caso de quedar afuera del máximo
torneo continental, podría desprenderse de algunos futbolistas. Mientras tanto,
en diciembre se cumplirán 16 años del último campeonato local, el Apertura
2002. ¿Podrá el Rojo detener la cuenta? ¿Holan logrará la remontada.
Fuente Olé
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.