Él nunca estuvo convencido del trueque, no le gustó la idea de ser canjeado con Iván Marcone y Agustín Rossi; menos terminar en Boca. Fabricio Bustos fue determinante para sentar su postura y derrumbar cualquier operación dirigencial.
Fue el propio defensor quien se le acercó a Lucas Pusineri después de un entrenamiento para manifestarle su deseo de quedarse en Independiente y, en un futuro, emigrar a Europa. Hizo todas la inferiores en el Rojo y su ilusión es dejarle dinero por una venta.
Ante esto, finalmente los directivos declinaron la transferencia y el Tractor se quedará un tiempo más en el único Rey de Copas. Sutil, pero alegre, en sus redes sociales posteó “#TodoRojo
o”, ni azul, ni amarillo, ni nada… ¡Bien Rojo!
Fuente Infierno Rojo
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