Hace dos días, Independiente elevó una oferta formal al Mazatlán para llevarse a Sebastián Sosa. Se trató de un préstamo sin cargo y con opción de compra de un millón de dólares por el 100% del pase.
Jorge Burruchaga, Manager del Rey de Copas, explicó:
“Ahora depende de Sosa, que tiene un año de contrato y que
en principio tiene un acuerdo de palabra para salir del club mexicano. De ser
factible su partida, hoy sería el apuntado”.
Y el arquero empezó a moverse: el martes por la tarde se reunió con el presidente de Mazatlán para manifestarle su deseo de partir. La información de InfiernoRojo es que fue una charla positiva, pero que la franquicia no está del todo convencida.
En primer lugar, el conjunto violeta perdería a su arquero titular y en segundo lugar, no recibiría dinero. Esos son los motivos que hacen dudar a la mesa directiva de un Mazatlán que navega por el fondo de la tabla de la Liga MX.
El golero insistirá, amparado en una palabra que le dieron meses atrás. A sus 34 años, el uruguayo entiende que Independiente es el último gran desafío deportivo de su carrera y está dispuesto a rebajar ampliamente su sueldo. En Avellaneda lo esperan.
Fuente Infierno Rojo
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