Independiente: Cantero y los jugadores sostienen a Brindisi.

Ilustró rrrojo

Con dos puntos en tres fechas de la B Nacional, varios dirigentes quieren ya un cambio de entrenador./"LA NACIÓN".  

Independiente sigue moviéndose en medio de la inestabilidad incluso cuando no juega. Y, a la espera del partido con Atlético Tucumán, el próximo fin de semana, se pregunta si un triunfo podría descomprimir la atmósfera pesada alrededor del plantel, del DT Miguel Brindisi y de los dirigentes. Uno, seguramente, no. Los Rojos, en realidad, precisan una sucesión de victorias para adaptarse a la B Nacional. Y como dos puntos en tres fechas son demasiado poco, ayer otra vez se escucharon las versiones más variadas alrededor de la continuidad de Brindisi. No hubo ninguna palabra oficial en medio de una tensa espera.

El DT resiste por más que muchos dirigentes ya le retiraron la confianza. Es más, algunos ni siquiera se la habían dado cuando el conjunto descendió porque querían un hombre de la "categoría" al frente del conjunto. Lo concreto es que el presidente Javier Cantero no quiere que Brindisi se vaya por el compromiso que asumió en primera cuando nadie quería venir, pero varios integrantes de la comisión directiva exigen un cambio. Debilitado por las últimas decisiones y las flojas campañas, el mandamás de los Rojos sabe que no tiene mucho margen de maniobra si los triunfos no llegan cuanto antes.

Otro de los puntales de Brindisi es el plantel. Los jugadores respaldan al entrenador. Lo demostró públicamente el capitán Daniel Montenegro, que lo abrazó después del segundo gol en el 2-2 con Aldosivi. Y, en privado, también lo hicieron varios futbolistas en conversaciones telefónicas con los dirigentes. A todos, cuerpo técnico y jugadores, les molestaron los rumores de que ya hubo contactos con otros directores técnicos: Omar de Felippe y José "Pepe" Romero.

Allegados cuentan que Brindisi está preocupado, pero no abatido. "Nos vemos en Tucumán", dijo, al paso, en Avellaneda. Independiente se maneja minuto a minuto.

Fuente La Nación