Ilustró rrrojo
Por Beto Tisinovich
Basta, señores. Y lo digo en todos los sentidos.
Dirigentes, jugadores y cuerpo técnico.
No me vengan con que en el segundo
tiempo demostraron orgullo y que casi empatan.
Estamos cansados de ver este
rejuntado que sigue manchando la rica historia que refleja ni más ni menos lo
que es el club totalmente a la deriva.
Aunque el actual presidente está
orgulloso de la gestión. Cantero, lea. “NOS MANDO AL DESCENSO”.
Usted fue capaz
de hacer la cosa más difícil del mundo. Que Independiente juegue en segunda.
Hundió un corcho. ¿Se da cuenta?
Y no contento con eso armó un plantel de
B Metropolitana y ahora quiere profesionalizar el fútbol trayendo a Marangoni.
¿Quién lo mandó para humillarnos de tal manera?
Los 34.000 socios nuevos no se
hicieron por su gestión, lo hicieron por amor al club.
Cosa que algunos de
nuestros players no tienen.
De la boca para afuera son unos fenómenos.
Que se
están acostumbrando a una categoría en la que nadie regala nada y bla, bla,
bla.
¿Por qué entonces en Primera no aprovechamos los obsequios? Metan al
menos, tengan dignidad. En la última pelota del primer tiempo, en el que
merecían irse tres goles abajo, la jugaron con un displicencia digna de un
equipo de casados que se comió cuatro platos de ravioles.
Para Brindisi, el
agradecimiento de haber agarrado el equipo cuando nadie quiso y bancarse que le
trajeron al cuarto nombre de la lista de refuerzos que pidió. Es un grosero
error haberlos aceptado y, después, no encontrar una línea de juego y hacer
cambios inentendibles.
No darle titularidad a Pisano, meter a Parra como manotazo
de ahogado y no estudiar mejor a los rivales.
El final es para la oposición.
Ayuden, no destruyan más de lo que está.
Basta de seguir hablando que vamos
hacer esto y aquello.
Vayan a Avenida Mitre y expongan todos sus proyectos en
la mesa.
Dejen de lado sus egos, Independiente nos necesita a todos.
Fuente Olé
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