Barco contó que se emocionó en pleno campo de juego por la
ovación de los hinchas y, humilde, avisó: “Las oportunidades me las tengo que
ganar”.
Por Favio Verona
Todavía está conmovido. Después de cumplir su anhelo de
convertir su primer gol, Ezequiel Barco pasó la noche concentrado junto a sus
compañeros en un lujoso hotel del centro porteño. Al juvenil de 17 años le
costó dormir tras haber soñado despierto. Recién después del mediodía, una vez
que finalizó el entrenamiento matutino, pudo reencontrarse con sus familiares,
a quienes les reservó un obsequio. “La camiseta es para mis seres queridos, que
estaban en la tribuna. No les pude dedicar el gol en la cancha porque mis
compañeros se me vinieron encima”, le contó el pibe de Villa Gobernador Gálvez
a Olé . El Turri, como lo apodan, vivió una noche que jamás olvidará. Los
hinchas lo ovacionaron y se emocionó de tal forma que no pudo contener las
lágrimas. “¡Quedate a vivir, con vos ganamos la Libertadores!”, le gritaron
mientras dejaba el estadio. El chico, humilde y tímido, sintió un poco de
vergüenza y respondió con un “gracias” apenas audible.
-¿Esperabas vivir una noche así?
-No, pero siento una
felicidad muy grande por haber podido ayudar a mis compañeros. Conseguimos un
triunfo muy importante y ahora deberemos mantener el nivel ante Lanús. Sufrimos
y tenemos que seguir mejorando, pero pudimos mostrar lo que hacemos en los
entrenamientos.
-¿Qué se te pasó por la cabeza cuando te quedó la pelota del
gol?
-Vi que salía el arquero y supe que le tenía que pegar como venía porque
otra no me quedaba.
-En menos de media hora pateaste tres veces al arco, tiraste
un caño y metiste un gol. ¿Fue tu mejor partido?
-Sí, claro. En la del caño,
cuando vi que abrió las piernas, supe que esa era la mejor opción para salir.
-¿Escuchaste la ovación de los hinchas?
-Sí, me di cuenta
enseguida y fue muy emotivo. Me tocó meterla a mí, pero el gol fue el resultado
del esfuerzo de todos.
-¿Por qué lo celebraste de esa forma?
-Porque habíamos
ensayado el festejo con Figal en la habitación. Si meto otro, lo voy a mantener.
Ojalá haya varios más.
-¿Qué te dijeron en el vestuario?
-Mis compañeros me
felicitaron por el gol y por lo que demostré. Con el técnico todavía no hablé,
pero seguramente lo voy a hacer.
-¿Advertís que de a poco te estás afianzando?
-Sí, pero soy
consciente de que las oportunidades me las tengo que ganar en cada partido.
Cada vez que me toque entrar, tengo que aprovechar para demostrar lo que puedo
dar.
-¿Están ilusionados?
-Más bien. En el torneo tenemos que
seguir con este ritmo. Y tenemos equipo para pelear la Copa.
Fuente Olé
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