Aparecieron en Primera División prácticamente a la par,
luego de conocerse en la Reserva dirigida por Fernando Berón en la temporada
2016. El Tractor hizo su debut de la mano de Gabriel Milito ante River,
mientras que el central apareció en un Clásico de Avellaneda en el verano de
2017.
Ambos fueron potenciados por Ariel Holan y pilares
fundamentales de la Copa Sudamericana 2017; es más, los dos fueron citados a la
Selección Argentina por haber alcanzado niveles sobresalientes. Tras la
obtención de la Suruga Bank 2018, el equipo campeón se desarmó, el vestuario se
resquebrajó y hoy son de los pocos que quedan de aquella camada ganadora.
Tras varios amagues en mercados anteriores, ahora sí podrían
ser vendidos -por montos inferiores a los en algún momento se barajaron-. Si
bien son dos de los futbolistas que podrían dejarle mayor dinero al club, el
dilema radica en que el Manager cree que se les podría hacer una mejora
económica y retenerlos por seis meses o un año más. Transferirlos significaría
ir a buscar reemplazantes en los dos puestos.
Aunque todavía no llegaron ofertas, los representantes de
Franco y Bustos se mueven para acercar posibilidades de distintas ligas
europeas y que la dirigencia del Rojo luego tome la decisión. La realidad es
que ambos querrían dar un salto en sus carreras y también generarle un ingreso
sustancial a un club que lo necesita imperiosamente.
Fuente Infierno Rojo
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