“La copa del ’95 fue una de mis mayores alegrías. Habíamos
empezado flojos, con todas las críticas encima, es común en Independiente
cuando el equipo no rinde”, planteó Miguel Ángel López al recordar la obtención
de la Supercopa 95 como DT del club y logrando el primer Maracanazo.
Luego, al explicar cuál era la impronta de ese equipo, el
Zurdo marcó:
«El buen juego es para ganar. Nosotros hacíamos nuestro
juego pensando en ganar y lo demostramos muchas veces. Era un equipo netamente
ganador».
Y en charla con La Visera, marcó cómo se sostuvo en el
tiempo el plantel:
«En cinco años siempre éramos los mismos, nos conocíamos
perfectamente, estaba todo definido. Se sabía a qué jugábamos y qué queríamos.
Independiente tiene ese don de hacerle sentir al jugador lo que pesa y
significa la camiseta».
En el final, al opinar de la actualidad del club, dejó un mensaje de unidad:
«Independiente está obligado a vender para mantener la parte
económica. Hay que hacer el aguante, no se puede pretender en una etapa de
muchos cambios que de la noche a la mañana se normalice todo en cuanto a
triunfos, copas y logros. Hay que respetar también la opinión del hincha».
Y agregó al concluir acerca del club: «Hay que respetarlo,
hay que tener huevos. Se putee o no, el Rey de Copas siempre será el Rey de
Copas».
Fuente Infierno Rojo
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