Por Christian Ginko
Con un Emiliano
Martínez clave cuando más lo necesitó el equipo y Nicolás Tagliafico en su
mejor nivel, Argentina derrotó 1-0 a Chile con gol de Lautaro Martínez y selló
el pase a la fase de eliminatorias.
Si hay que hablar
de partidos chivos, con Chile fue uno de ellos. El triunfo de Canadá sobre Perú
le había servido en bandeja la posibilidad a Argentina de que se meta en
cuartos ese mismo día, pero el rival no lo iba a dejar. En un duelo más peleado
que jugado, en el que Emiliano Martínez y Nicolás Tagliafico fueron
protagonistas, finalmente fue el mejor el que triunfó.
De arranque, y
tal como nos tiene acostumbrados, la Scaloneta propuso fútbol. Con pases
automáticos y al primer toque, la idea era desconfigurar las líneas de los
trasandinos, que pese a la superioridad numérica abajo no podían cortar la
pelota. Así, en menos de un minuto, casi avisa la Albiceleste, pero la pelota
le quedó atrás a Enzo Fernández.
Pasaban los
minutos, y la intención era la misma. Jugar, y a los pases, llegar al final.
Casi le queda a Julián Álvarez, pero no pudo conectar bien, y Lionel Messi pegó
un tiro lejano en el palo. Las imprecisiones eran el gran problema a resolver,
y esa vida que dejaba Argentina, avivaba cada vez un poco más a Chile.
Luego de un
remate de Nicolás González que atajó Claudio Bravo y luego dio en el travesaño,
se vio lo mejor de ellos. A sabiendas del desconcierto argentino ante las
situaciones falladas, empezaron a jugar un poco más arriba, y entonces probaron
al arco. En las dos ocasiones que lo hicieron, sin embargo, conocieron a
Emiliano Martínez. El ex alumno de Miguel Ángel Santoro, que lleva 30 vallas
invictas en 41 partidos con la Selección y solo recibió 16 goles (74% de
promedio, el más alto en la historia de la Selección), mostraba por qué fue
elegido el mejor arquero del mundo.
Y entonces, con
el guardián en su nivel más alto, retomó las riendas la Albiceleste. Lionel
Scaloni había metido, durante el partido, a Lautaro Martínez, que finalmente
respondió. Cuando faltaba poco para el final, y luego de una serie de rebotes,
el Toro aprovechó el último para darle con bronca y reventarle el arco a Bravo.
Sobre el final, la Scaloneta vio recompensada la búsqueda que había hecho
durante todo el partido.
Luego del aquel
gol agónico, convalidado vía VAR, solo hubo lugar para una más, pero Martínez
sobró la definición y se perdió lo que habría sido el 2-0 definitivo. Una vez
que Andrés Matonte pitó el final, Argentina se metió automáticamente en los
cuartos de final. Con el mismo hambre de siempre, el campeón del mundo fue el
primer clasificado a la fase de eliminatorias, y el próximo sábado jugará
contra Perú para definir si queda primero o segundo. ¡Vamos!
Fuente Infierno
Rojo
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