Por Martín Rubino
Hace 49 años,
Independiente consiguió su sexta Copa Libertadores y marcó un hito sin
precedentes a nivel continental. El Rojo era el equipo más poderoso del fútbol
sudamericano, dado que venía de ser campeón de la competencia en las ediciones
1972, 1973 y 1974, pero en 1975 obtuvo su cuarto trofeo en fila.
El Rey de Copas
ocupó el Grupo B de la segunda fase y quedó puntero luego de dos victorias y
dos derrotas. La zona culminó con todos los integrantes con cuatro unidades,
pero el Rojo consiguió una diferencia de gol superior a Rosario Central y a
Cruzeiro de Brasil.
Tras meterse en
una nueva final, el rival de turno fue Unión Española de Chile, que que debió
enfrentarse en su camino Huachipato de Chile, The Strongest y Jorge Wilstermann
de Bolivia, y luego a Universitario de Perú y Liga de Quito de Ecuador.
La primera final
se disputó en el Estadio Nacional de Santiago de Chile, en donde los locales
ganaron por 1-0 con tanto de Sergio Ahumada a tres minutos del cierre. Una
semana después, la Doble Visera explotó de gente e Independiente se impuso 3-1
con goles de Percy Rojas, Ricardo Pavoni y Daniel Bertoni.
El partido
definitorio se llevó a cabo en una cancha neutral, que fue el Defensores del
Chaco de Paraguay. Aquella noche, una nueva página dorada fue escrita y tuvo
como principales protagonistas a Ricardo Ruiz Moreno y Daniel Bertoni, quienes
convirtieron para darle la victoria al equipo de Pedro Dellacha.
Hoy se cumplen 49
años de esta extraordinaria hazaña, que le otorgó la sexta Copa Libertadores a
la institución y la cuarta en fila, algo que demuestra lo grande que es
Independiente.
Fuente Infierno Rojo
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.