El destape

Avalos le marcó a Lanús.

 

Por Nahuel Lanzillotta

 

Gabriel Avalos marcó su tercer gol consecutivo en los últimos tres partidos y al fin se muestra como el nueve que fue a buscar Independiente. Las claves de este cambio.

 

Se destapó. Lo que todo Independiente estaba esperando está sucediendo al fin. Muchos le prendían velas y ya no sabían a qué santo rezarle. Otros estaban a punto o incluso ya habían perdido toda fe en él. Sin embargo, Gabriel Avalos parece haber arrancado a ser el ‘9’ del Diablo. El centrodelantero goleador de quien se espera justamente eso, que la meta. En la Fortaleza volvió a mojar y ya lleva tres conversiones en las últimas tres fechas cuando antes había hecho apenas cuatro en sus primeros 32 encuentros.

 

 

¿Qué cambió para este cambio del Paraguayo? ¿Fue su mentalidad la que viró o sus compañeros empezaron a buscarlo más con centros y asistencias? Un poco de ambas cuestiones, sobre todo de la segunda. Avalos continúa con su mismo juego de siempre, de hecho mantiene esos lapsos en los que sale del área, el hábitat natural de todo goleador, para conectar con los extremos e incluso con los medios. Pero en estos últimos encuentros tuvo mucho más el arco rival entre ceja y ceja y, además, recibió más pelotas en zona de fuego para tener chances netas.

 

El centro de Santiago Salle a la cabeza ante Tigre. El centro de Diego Tarzia a la cabeza para bajársela a Federico Mancuello en el primero ante Lanús. El pase filtrado de Santiago Montiel para el segundo de la noche de este viernes. Esas son las asistencias que terminaron en gol, aunque existieron algunas más en esos partido que no logró concretar.

 

La vuelta al gol de Avalos es la gran noticia para Julio Vaccari y el equipo. Tener al centroatacante encendido y en racha es vital para todo elenco que busca un objetivo puntual. El de Independiente ahora es sumar y sumar para asegurarse el ingreso a una Copa en 2025. Y los resultados se empiezan a ver. Con dos triunfos seguidos, con aportes goleadores de su ‘9’, el Rojo ya puso sus pies en zona de clasificación.

 

Anotar le devolvió la confianza al guaraní. Es cierto que nunca bajó los brazos y que el entrenador lo respaldó en todo momento, incluso ante el desánimo popular que ya lo empezaba a mirar de reojo. Le tocó salir en algún que otro segundo tiempo, cabizbajo, frustrado. Pero siempre volvió a la titularidad al siguiente cotejo. Hasta que el arco se le abrió.

 

Se ha dicho en anteriores columnas de LLDD, Gabriel Avalos reúne todas las características de un nueve completo: tiene buen porte, buen juego aéreo, presencia en el área, remate, sabe pivotear y no es ningún negado con la pelota en los pies, todo lo contrario. Le faltaba la cuota del gol, algo no menor en su puesto porque justamente el Rojo lo compró por sus goles en Argentinos.

 

Ante Lanús reconfirmó su momento y animó a la esperanza de que no se trata solamente de una rachita, se podría estar en presencia de al fin el destape de Avalos. El ánimo le juega a favor. La asistencia de cabeza a Mancu, juntando a los dos centrales rivales y bajando esa pelota hacia atrás todo en un solo movimiento que incluyó destreza y lectura inteligente de la jugada, es una muestra de ello. Y su definición eludiendo a Nahuel Losada y marcando de zurda selló una jornada en la que fue decisivo en el resultado final.

 

Así y todo, le falta un poco más del egoísmo del ‘9’. Una jugada antes de su tanto, tuvo una chance inmejorable para anotar en una corrida entrando al área por la derecha. Tenía espacio y tiempo para rematar; prefirió el pase a Santi López, que estaba marcado, y la jugada se diluyó. Pedía tiro al arco y optó por dársela a un compañero. Se celebra el juego colectivo y la solidaridad, pero el goleador es goleador también por su cuota de egoísmo y su idea fija de apuntar al arco rival al primer hueco.

 

Ajustando esto y si continúa en esta senda, por confianza propia y por la búsqueda de sus compañeros, Avalos tiene todo servido para que este destape lo afianza de una vez por todas en el centrodelantero que Independiente necesita.

 

 

Fuente Infierno Rojo