Por Favio Verona
Tagliafico cree que, con el correr de los partidos, el
equipo rendirá bastante más que ante Newell’s. “Lo más importante es encontrar
un equilibrio”, aseguró.
Hay un cartel que deberá revalidar. Nicolás Tagliafico
desembarcó en el Rojo cargando en la mochila el rótulo de promesa. Y sabe que
tendrá que ratificarlo. Fue codiciado por varios clubes que pretendían poblar
un puesto que es tierra desértica en el fútbol argentino: el lateral izquierdo.
“Me incliné por Independiente porque me sedujo la propuesta del técnico”, le
contó a Olé el defensor de 22 años, quien el sábado tuvo su debut ante Newell’s
(3-2).
-¿Cómo te sentiste?
-Teniendo en cuenta que no tuve muchos minutos en la
pretemporada, que me faltaba un poco de fútbol y que sólo había practicado tres
veces con el plantel, me sentí bien. Igualmente creo que voy a dar más.
Mejoraré a medida que me vaya adaptando al equipo y conociendo a mis
compañeros. Creo que voy a ir de menor a mayor y en un tiempo volveré a ser el
de Banfield.
-Tu llegada generó muchas expectativas...
-Sí, lo noté. Mucha gente me agradeció por haber venido. Y
ahora voy a tener que demostrar por qué estoy acá. Voy a tener que adaptarme
rápido. Será un cambio grande.
-¿A qué te referís cuando decís que vas a tener que
adaptarte?
-En Banfield había cinco periodistas en cada práctica y acá
vienen 30. Las diferencias son muchas. Allá algunas cosas quizá no se notaban y
acá hay más exposición, el seguimiento es constante. Me sorprendió la ilusión
que hay en relación al equipo que se armó. El martes los hinchas hicieron siete
cuadras de cola para conseguir una entrada. Eso es impactante.
-La ilusión que se generó puede ser un arma de doble filo.
¿Cómo van a hacer para que no se transforme en presión?
-Creo que el equipo va a andar muy bien. Llegaron jugadores
importantes y tengo mucha fe. Pero recién va una fecha. Fue muy importante
arrancar ganando para trabajar con tranquilidad, pero no hay que confiarse.
Podemos jugar mucho mejor y lo vamos a hacer cuando empecemos a conocernos.
-¿Qué fue lo que más te gustó y lo que menos te convenció
del equipo en el primer partido?
-Hicimos un buen primer tiempo en el que fue fundamental la
presión que ejercieron los delanteros. Y en el segundo nuestro rendimiento
bajó. El hecho de que lo fuéramos a buscar después del empate de Newell’s
resume lo que somos como equipo.
-Respiraste hondo después del gol del Ruso Rodríguez...
-Sí, porque unos minutos antes me habían cobrado el penal
del 2-2. Si bien existió el contacto, Rapallini pudo no cobrarlo. No creo que
el choque haya sido tan fuerte como para que (Tévez) se tire de esa forma. No
protesté porque estaba amonestado. Por suerte pudimos revertirlo.
-Por momentos el equipo quedó muy expuesto. ¿Genera
preocupación?
-Es uno de los puntos a corregir. Tenemos mucho peso
ofensivo y no hay que dejar solos a los delanteros, ya que si les llega bien la
pelota podemos convertir con facilidad. En lo defensivo tenemos que corregir
muchísimas cosas. Independiente trata de jugar siempre bien arriba, con la última
línea adelantada. Eso lo hacíamos con Matías (Almeyda), pero aún no habíamos
logrado aceitarlo. Lo más importante es encontrar un equilibrio y siempre es
más fácil hacerlo después de un triunfo.
-¿La propuesta de Almirón es similar a la de Almeyda?
-Sí. Demanda mucho despliegue físico. Para poder sostener
esta propuesta es necesario que se sacrifiquen los 11, ya que si uno no lo
hace, estaremos dando una gran ventaja. Los defensores deberemos pasar al
ataque, pero los delanteros tendrán que ser los primeros defensores cuando la
tenga el rival.
Fuente Olé
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