Ya pasaron casi dos años de la salida de Ariel Holan, pero
las secuelas de su ciclo persisten. Por un lado, están los que le recriminan la
mayoría de los refuerzos que llegaron durante su estadía, y por otro existen
quienes le agradecen por haber vuelto a elevar la vara en Independiente. El
Profesor es una persona que, en cierto modo, divide opiniones.
Lo cierto es que, luego de haber salido campeón con Universidad Católica de Chile, el ex entrenador del más grande recordó su paso por el Rojo, y explicó:
«Durante mi tiempo con Independiente, dos años y medio, intenté hacer todo lo posible para que el club crezca. Yo miraba en Europa la organización de los clubes como Barcelona, Bayern Múnich, Ajax. Clubes que tienen una escuela muy ordenada. Es un proceso de formación de verdad, profundo». Y amplió:
«Yo quería que Independiente empezara ese camino. Un
camino súper profesional en el fútbol infanto-juvenil».
En relación a lo que fue dirigir al Rey de Copas, el director técnico de 60 años fue elocuente:
«Decidí dar un paso al costado en
Defensa y Justicia, y vino el sueño que fue dirigir a Independiente. Era el
sueño de mi infancia hecho realidad en la madurez de mi vida, y en el fútbol.
Era algo mágico, porque la pasión es la pasión».
Finalmente, en diálogo con coachesvoice.com, Holan habló de
la importancia que tiene la institución para él: «Viene de una historia muy
personal con mi papá, que me llevó de chico a ver a Independiente, y los
vínculos de mi generación con nuestros padres no eran los que tenemos nosotros
hoy con nuestros hijos». Y cerró: «Eran vínculos más distantes, y yo sentía que
el momento de mayor comunión, fraternidad, homogeneidad, fluidez, era en la
cancha viendo a Independiente«.
Fuente Infierno Rojo
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