Colaboraciones - El Clásico en un subibaja

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El clásico en un subibaja

Lo bueno y lo malo de Racing e Independiente para el desafío que se avecina en el estadio de La Academia; justo en la mitad del campeonato, una mirada de arriba a abajo

Por Francisco Schiavo  | LA NACION

Piensan en las consecuencias del resultado. Cualquiera que fuere. Como siempre. Más que nunca. Arriba, Racing, involucrado en la lucha por el Apertura. Abajo, Independiente, con apenas tres victorias en nueve fechas. Aunque el subibaja en un clásico puede volverse tan cambiante como una tormenta de verano. Al aguacero le sigue un sol que reseca la piel. Se jactan, mitad en serio, mitad en broma, de haberse convertido, al menos este año, en el superclásico del fútbol argentino, con River en la B Nacional y con Boca sin un par en quien verse equiparado en el cartel.

Racing e Independiente. Quedan a la vista virtudes y defectos de los tradicionales rivales. Cada uno tiene los suyos, aunque el presente encuentra a la Academia en un punto más alto, como si del juego de plaza se tratara. Al fin de cuentas, así se vive el mano a mano: como un pícaro desafío en un potrero cualquiera de Avellaneda, con pasión amateur, en el mejor sentido de la palabra, entre el profesionalismo más puro. Lo demás está por venir pasado mañana. Pulgar para arriba. Pulgar para abajo.

Una victoria solamente consiguió Racing en los últimos diez clásicos: casualmente, fue el más reciente, el 16 de abril de 2011, por 2-0; antes, los Rojos ganaron cinco y hubo cuatro empates.

A LA CAZA DE BOCA

Diego Simeone sabe a qué juega Racing y, pese a alguna duda puntual, tiene sus intérpretes definidos. De a ratos vertical en el juego ofensivo, encontró rápido la columna con Saja, Pelletieri, Moreno y Gutiérrez; además, tiene un buen recambio. A cuatro puntos del líder, Racing, aún invicto, tiene las aspiraciones en el punto más alto, como hacía rato que no le ocurría. Un triunfo ante Independiente le daría, además, un envión anímico vital: cinco fechas más adelante, en la 15ª jugará con los xeneizes.

FLOJO EN AMBOS FRENTES

Lejos de los primeros puestos, con tres derrotas en las últimas cuatro fechas y un errático debut en la Copa Sudamericana (0-2 ante Liga de Quito), Independiente tomó el partido ante Racing como una tabla de salvación y como un relanzamiento en medio del Apertura.

UNA IDEA DEFINIDA

Diego Simeone sabe a qué juega Racing y, pese a alguna duda puntual, tiene sus intérpretes definidos. De a ratos vertical en el juego ofensivo, encontró rápido la columna con Saja, Pelletieri, Moreno y Gutiérrez; además, tiene un buen recambio.

SIN UN ELENCO ESTABLE Las lesiones, las suspensiones y los vaivenes de las individualidades privaron hasta ahora a Independiente de una formación estable. No logró un esquema confiable cuando arriesgó ni cuando intentó defenderse.

TEO Y GIO, EMBLEMAS

Buena parte del potencial de Racing descansa en los colombianos Gutiérrez y Moreno. Entre los dos le dieron una identidad al equipo y, en gran medida, absorbieron la presión; formaron una buena sociedad entre pases gol y potencia en la red.

FLOJAS INDIVIDUALIDADES

No dieron soluciones a los inconvenientes colectivos de Independiente. La defensa, con Hilario Navarro, Gabriel Milito y cía., comete errores que cuestan caros y el ataque, con Facundo Parra, Leonel Núñez y Marco Pérez, no tiene profundidad.

DE LOCAL, MUCHO MEJOR

La gente de Racing armará una fiesta en el Cilindro, mucho más con el antecedente fresco de la última victoria ante Independiente, en esa misma condición (ver aparte). Bien utilizado, en el mero plano deportivo, el bullicio puede servirle.

UNA COMBUSTIÓN INTERNA

Por su reciente llegada, Ramón Díaz es el único que se salva de los reproches en Independiente. La gente les perdió la paciencia a los jugadores y a los dirigentes. Anoche, entre insultos al presidente Comparada, se aprobó el balance, con un pasivo de $ 190.000.000.

PATO LES DA ILUSIÓN

Aunque sigue con molestias en la rodilla izquierda, todo indica que, al menos, Patricio Rodríguez integraría el banco de suplentes en Independiente. Tras la artroscopia en la rodilla derecha, es la pieza que puede darles un valor agregado a los Rojos.

SIN TORANZO NI...

Patricio Toranzo, desgarrado, está descartado en Racing. Lucas Castro, con la misma lesión, será esperado hasta último momento, aunque su presencia es bastante complicada. Dos bajas sensibles: volantes con toque y salida.

NO CORRIÓ RIESGOS

Independiente valoró tanto el clásico que varios de sus referentes, entre ellos Gabriel Milito, se quedaron en Buenos Aires pese al partido en Ecuador. Tampoco viajaron Fabián Assmann, Eduardo Tuzzio, Maxi Velázquez, Cristian Pellerano y Facundo Parra.

SE CAE EN LA PARTE FINAL

Si bien mejoró contra San Lorenzo (0-0), Racing, en parte, por el desgaste de tanto despliegue de entrada y, en parte, por encontrarse en ventaja se retrasa y corre demasiados riesgos en los segundos tiempos. Ya le pasó en varios encuentros del Apertura.

DIXIT

"Tenemos que levantar porque todavía no pudimos ganar dos partidos seguidos. Es un club muy grande, con aspiraciones, y cuesta mantenerse tranquilo si las cosas no salen bien. Es el partido del año".

Fabián ASSMANN (Independiente)

"Ellos están mejor; eso dicen las posiciones, pero estos partidos son aparte. Debemos hacer un clic para reaccionar y salir adelante. No estamos bien ni futbolística ni anímicamente".

Facundo PARRA (Independiente)

"En cualquier parte del mundo se dice lo mismo sobre los clásicos: no se juegan, se ganan. Son especiales. Toda la semana se vive distinta. En Colombia siempre me fue bien. Y también en el último que jugué acá".

Teófilo GUTIÉRREZ (Racing)

"Ahora, sin River en primera, es el clásico más lindo de la Argentina. Tenemos que ganar para no perderle pisada a Boca. Nos da mucha confianza el hecho de que nos hicieron pocos goles en el torneo [ dos]".

Matías MARTÍNEZ (Racing)

Fuente La Nación