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miércoles, 21 de septiembre de 2011

Sufrir, ganar, gozar



Escrito por Walter Linovich el Miércoles, 21 septiembre 2011



En un partido luchadísimo, Independiente derrotó 3-1 a Atlético Rafaela y consiguió la primera victoria con Ramón Díaz en el banco. Leonel Núñez y Brian Nieva abrieron el camino, Nicolás Castro descontó y Osmar Ferreyra, de mitad de cancha, puso cifras definitivas.

Independiente fue altamente efectivo en el primer tiempo: tuvo dos minutos de furia en los que marcó dos goles y luego controló bien a un Atlético Rafaela que se mostró muy livianito. Así, el Rojo tuvo 45 minutos de tranquilidad.

A los 11 apuró el equipo local con un remate de Walter Serrano que contuvo sin problemas Fabián Assmann y dos minutos después respondió Independiente con un cabezazo de Gabriel Milito que Guillermo Sara descolgó del ángulo.

Y cuando el trámite era parejo, el Rojo se puso 2-0 en una ráfaga: a los 21, golazo de Leonel Núñez con un potente remate desde lejos y a los 23 buena definición de Brian Nieva para anotar el segundo.

Con los dos goles y la lesión de Iván Juárez, Rafaela se quedó sin ideas y, las pocas veces que logró arrimarse al área de Assmann, chocó una y otra vez con Gabriel Milito.

En el complemento, Independiente se metió muy atrás, más aún cuando Ramón Díaz sacó a Brian Nieva para poner a Nicolás Delmonte, y sufrió desde el comienzo hasta el final.

Lo tuvo primero Federico González pero Assmann le tapó un mano a mano y luego Milito salvó casi sobre la línea, pero llegando a los 20 Nicolás Castro sí logró vencer la resistencia del rubio arquero y marcó el descuento.

Sin piernas, el Rojo se refugió en su campo, pegadito a su arco, le cedió la iniciativa a Rafaela y rogó por una contra de Marco Pérez que nunca llegó. Salvo por una escapada de Walter Busse que Sara le tapó  a Parra, Independiente no atacó.

Sobre el final, cuando Rafaela iba e iba y ya había pegado un tiro en el travesaño, Ferreyra aprovechó que el arquero rafaelino fue a cabecear un tiro libre y, apenas pasando mitad de cancha, la clavó y liquidó el pleito.

Después de un buen primer tiempo y un complemento en el que se quedó sin resto físico, Independiente consiguió una victoria valiosísima, sobre todo por lo anímico, y mira con más alivio el futuro.

Fuente Infierno Rojo

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