Independiente logró cambiar la cara en el aspecto defensivo.
La llegada de Julio Falcioni, junto con la de Juan Insaurralde, le dieron otra
impronta a una defensa que cada partido era noticia por errores insólitos. Sin
embargo, en el ataque sigue dejando bastante que desear, y eso le costó la
eliminación de la Copa de la Liga.
En un principio, el Rojo formaba con Sebastián Palacios por
izquierda, Alan Velasco por derecha y Silvio Romero en el área. La Joya, sin
embargo, apenas pudo disputar poco menos de la mitad de los minutos que jugó el
equipo (el 44,09%, para ser más exactos), algo que se debió al COVID, por un
lado, y por otro a que el Emperador prefirió intentar con otros futbolistas en
algunos tramos del semestre.
Uno de ellos fue Jonathan Menéndez. El ex Talleres fue
tenido en cuenta por el entrenador en varias ocasiones, hasta en el Clásico de
Avellaneda. El Mellizo sumó apenas 94 minutos (un partido con adición incluida)
menos que Velasco, y casi siempre se desempeñó por la derecha. Sin embargo, hoy
ya no es parte del plantel, por lo que es una variante menos.
Otro que supo ser parte de las bandas fue Andrés Roa. El
colombiano, que sumó 603 minutos, jugó de extremo en algunas ocasiones (como
con Colón), aunque son contadas las veces que le tocó hacerlo desde el
arranque. Sin embargo, daría la sensación de que la mejor versión de Roa se ve
cuando juega detrás del 9, algo que también sucede con la Joya.
La gran falencia del Rey de Copas se vio ante la falta de
sorpresa, ya que apenas llevaba peligro por el lado de Sebastián Palacios,
mientras que el otro extremo siempre era una incógnita, y casi nunca terminaba
siendo gravitante. Será vital, sobre todo ante la salida de Menéndez,
incorporar algún extremo, de lo contrario Falcioni deberá pensar en modificar
el ataque para amoldarse al plantel que tiene.
Fuente Infierno Rojo
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