Uno de los puntos altos de Independiente en este semestre
fueron las atajadas de Sebastián Sosa. Si bien el arquero mostró ciertas
falencias al salir, mostró solvencia debajo de los tres palos y desde los 12
pasos fue muy efectivo a la hora de atajar penales, donde le patearon 11, atajó
5 y el otro se fue afuera.
Sus buenas intervenciones, seguida de su personalidad lo
pusieron en carpeta de diversos clubes en este mercado de pases, los cuales
comienza a generar los primeros sondeos.
Uno de esos clubes es Boca, un viejo conocido para el
uruguayo, donde atajó entre el 2011-2012, defendiendo el arco en 12 partidos.
Allí ganó un torneo local y obtuvo un subcampeonato en la Copa Libertadores.
Quién no tuvo gran continuidad en ese entonces, aparece como uno de los
posibles refuerzos del Xeneize.
El arquero de Independiente es seguido de cerca por el consejo de fútbol de la ribera para que retorne al equipo en el que no pudo desplegar todo su potencial. Este interés viene aparejado de que al golero se le debe dinero desde su llegada al Rey de Copas; una situación de la que se sentarían a hablar en los próximos días con la dirigencia.
Pese a esto, aún no hubo nada formal. Además, el Uruguayo
todavía tiene seis meses más de contrato con el Orgullo Nacional, momento en el
que se tendrá que pagar 1.000.000 de dólares de querer que sea oficialmente
jugador de Independiente. Cabe recordar, que, en la pasada Copa de la Liga
Profesional, el arquero le atajó un penal sobre la hora a los dirigidos por
Miguel Ángel Russo, en lo que podía ser una agónica derrota.
Al igual que con Fabricio Bustos y Silvio Romero, otra vez
los bosteros.
Fuente Infierno Rojo
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