Por Luca Briones
El volante colombiano, Andrés Roa, volvió a tener una muy
mala noche y, más allá de convertir el gol, se fue reemplazado y silbado por la
gente. ¿Qué harías con el Parcero?
Un empate agridulce y con sabor a poco fue el 1 a 1 entre
Independiente y Central Córdoba, por la Fecha 6 de la Copa de la Liga
Profesional 2022. Para el olvido en todo sentido. Y para el olvido también el
nivel de Andrés Roa, quién nuevamente dejó mucho que desear.
Andrés Roa tiene dos caras distintas. Por un lado, la
negativa: A otro ritmo, en otra sintonía por debajo de la esperada y sin
aceleración. Por el otro, los destellos intermitentes que generan jugadas
peligrosas en ataque. Sin embargo, en la noche de este lunes primó la negativa,
más allá de que haya convertido un gol.
El colombiano, quién jugó solo 66 minutos y convirtió el
primer gol del partido, acertó 19 de los 24 pases que realizó (79% de
efectividad). Sin embargo, ganó solo 3 de los 8 mano a mano y duelos
individuales que se le presentaron en esos minutos. Además, perdió la pelota en
9 ocasiones.
Ya no solo pasa por la estadística en sí. Andrés Roa no
parece entender el contexto del partido en el que se está jugando y eso al
hincha lo desgasta. Ahora se viene Racing, nada menos que un clásico. La gran
incertidumbre pasará por ver que hace Eduardo Domínguez con este futbolista:
¿Sigue apostando por él o desestima la posibilidad de ponerlo y juega otro? Un
Chila Márquez, un Tomás Pozzo…
Fuente Infierno Rojo
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