Se sobreinterpretó en el arranque del torneo la falta de
refuerzos. Independiente posee un plantel corto, con algunos jugadores que
pueden llegar a ser titulares, pero en el banco no tiene variantes potables.
Apenas algunos destellos por momentos, esos mismos que hicieron creer al hincha
que el Rojo estaba para campeón, pero ahora es distinto.
El Rojo hoy tiene que apostar a los chicos de Villa Domínico
para el armado del plantel, y por momentos le sale bien, aunque generalmente
no. El arco y la zaga central están cubiertos, pero por la derecha, si se llega
a ir Fabricio Bustos, la primera variante es Gonzalo Asís, con poca
experiencia. Ni hablar de la izquierda, donde ahora que Lucas Rodríguez es
baja, Julio Falcioni apuesta por Thomas Ortega, y hasta experimentó cambiando
de posición a Ayrton Costa.
En el medio, por su parte, hay futbolistas. Lucas Romero,
Lucas González, Domingo Blanco y Alan Soñora le dieron mucha tranquilidad al
Emperador por un momento. Aún así, cuando los tres primeros no pudieron jugar
contra Atlético Tucumán, el DT tuvo que improvisar con Patricio Ostachuk, algo
que salió bien como, con mayores probabilidades, podría haber salido mal.
Pasando al ataque, es alarmante la situación. Silvio Romero
es el único que logra hacer la diferencia cuando le llega la pelota, pero esto
casi nunca sucede. Alan Velasco alterna constantemente entre la derecha y el
medio, y casi siempre decide de forma fallida. Braian Martínez, por su parte,
tiene velocidad, pero peca de inexperto a la hora de jugar la pelota.
Falcioni, ante la falta de variantes, busca la solución en
la Reserva, como ha hecho con varios de los ya mencionados, y hay que agregar a
Tomás Pozzo, Gastón Togni, a Rodrigo Márquez y a Juan Zarza, entre otros. No,
no se trata de un proyecto, se trata de un manotazo de ahogado, como le sucedió
a Lucas Pusineri.
Y al principio del torneo se podía agregar a Sebastián
Palacios, pero ahora ya no. El Tucu era una buena opción por derecha: Pese a
sus imprecisiones, lastimaba con su velocidad, y varias jugadas de gol pasaban
por él. Era titular en el equipo del Emperador, y paradójicamente, el
anteúltimo partido que ganó Independiente, fue el último del ex Talleres en el
equipo, contra Colón el 28 de agosto.
Hoy, el plantel del Rojo es corto. No es ninguna novedad, lo
único novedoso fue llegar a la fecha 8 como puntero. Desde el cuerpo técnico,
intentan lo que pueden con lo que hay, pero no alcanza, y el único refuerzo que
llegó, recién fue habilitado para el duelo con el Sabalero. Los responsables ya
se sabe quiénes son, y ni siquiera se puede decir que están en Mitre al 470.
Fuente Infierno Rojo
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