Bebote y el disfraz con el que se mostró en conferencia de
prensa. ¿De superagente?
Por Gustavo Grabia
Una causa de la SIDE por supuesto espionaje inglés dejó al
desnudo relaciones entre barras y agentes con Bebote como actor central.
No tiene la sagacidad de Sean Connery, el Bond más famoso de
la historia. Ni la presencia de Daniel Craig, el británico que revivió la saga.
Pero nosotros también tenemos nuestro 007. Y es barra. Parece ciencia ficción,
pero es real: en una causa iniciada por supuesto espionaje inglés en nuestro
país, se descubrieron vasos vinculantes entre espías y barras y uno está
mencionado con nombre y apellido: Pablo Alvarez. Después varios se sorprenden
de la impunidad de los dueños del tablón.
El caso lo investigó el fiscal Federico Delgado bajo la
supervisión del juez Sergio Torres. Todo inició cuando la ex Secretaria de
Inteligencia (hoy AFI) se presentó solicitando intervenir varios teléfonos bajo
la sospecha de que la filial argentina de la empresa británica Dark Star
Security desarrollaba tareas de contraespionaje relacionadas a la cuestión
Malvinas.
En abril de 2015, tras tres años de trabajo, el fiscal
concluyó que no había constancias de ello y que el pedido de la SIDE fue una
pantalla para escuchar a políticos, empresarios, funcionarios y abogados para
sumar datos que pudieran comprometerlos en otras circunstancias. Generar los
famosos carpetazos. En medio de todo eso, aparecen los barras. En las hojas 20,
30, 31, 34 y 127 del cuerpo 38 de la causa, se transcriben escuchas de
intervenciones ilegales donde se mencionan relaciones de políticos con barras
documentados supuestamente con fotos comprometedoras. Delgado pidió el archivo
del proceso original pero que se investigue si hay nuevos delitos, y eso recayó
ahora en el fiscal Franco Picardi.
Según pudo averiguar Olé , las supuestas fotos no se
anexaron a la causa y es material que la SIDE debería entregar. Y de todas las
escuchas, sólo están transcriptas las que involucran a Bebote. En cinco CD que
van del 698 al 703, hay diálogos entre la central de inteligencia y dos
supuestos agentes inorgánicos. Uno, Leonardo Scatturice, CEO de C3 Consultings,
filial local de la empresa de seguridad del ex agente CIA, Frank Holder. El
otro es de apellido De la Fuente. En sus diálogos aparece Bebote como amigo de
ambos, participando de operaciones y hasta haciendo correr gente “a los tiros”.
También hablan de relación con el jefe de la AFIP, Ricardo Echegaray, Hugo
Moyano, el Puma Jorge Damiani, dueño de los kioscos Open 25 y Cristian Ritondo.
Todos relacionados con Independiente. ¿Puede existir una operación por el color
político del club? Sí. Pero sobre lo que en Tribunales no dudan es que barras y
espías son más que viejos conocidos. Ahora Picardi analiza el material para ver
si puede avanzar. Y si lo hace, una bomba está a punto de estallar.
Fuente Olé
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