Foto: AFP
Por Daniel
Arcucci
VIÑA DEL MAR.- A la hora en la que jugadores de la Argentina
y de Jamaica salieron a la cancha, cuarenta y cinco minutos antes del comienzo
del partido, parecía verano. El sol entraba pleno sobre el estadio, enclavado
en lo más alto de Viña del Mar, junto a la laguna Sausalito, que le da el
nombre, y con 26 grados se respiraba un aire de vacaciones. Como de partido de
verano, de pretemporada.
Era una oportunidad para que el equipo de Martino practicara
sus movimientos, para que alguno de sus jugadores se reencontrara con la
confianza, para que otros la ratificaran, para que se mejoraran defectos. Y eso
fue, en definitiva, ante un rival de pobreza extrema, al que costó reconocerle,
incluso, el esfuerzo con el que había complicado algo a Uruguay y Paraguay.
1) Lo aprovechó Pastore. Definitivamente convertido en el
socio de Messi, arranca por derecha y recorre como si se deslizara sobre el
césped. Sus giros, elegantes, se han vuelto un clásico, como si el juego
argentino pasara por una puerta giratoria.
2) No la terminó de aprovechar Higuaín. En el gol del
segundo 9 elegido por el entrenador, la tocaron todos los jugadores de la
selección. Todos, hasta Romero. Y Pipita se aprovechó de los espacios que le
regalaron o los que se supo generar. Hizo un primer tiempo aceptable, no sólo
por el gol, pero un muy flojo segundo, no sólo por haberse perdido uno
imposible.
3) Lo desaprovechó el equipo. Como aburguesado en la falta
de equivalencias, dejó de lado el instinto matador que había tenido, por
ejemplo, el Chile herido pero superior contra la Bolivia clasificada y
entregada. Una actitud que dejó el resultado corto y que dejó en evidencia lo
que a Martino le precoupa, incluso más que los riesgos a los que se expone, que
ya están asumidos: la falta de precisión para definir, que deja los partidos
abiertos hasta el sufrimiento, tanto ante un bravo Uruguay como contra un
ínfimo Jamaica.
Pareció un partido de práctica, pero no lo fue. De haberlo
sido, Martino lo hubiera parado más de una vez para corregir cosas. Fue un partido
de pretemporada, en todo caso, porque en lo que viene, contra los que vienen,
no queda margen para las dudas.
Fuente Cancha Llena
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