Por Maria Eugenia Stamm
Fernando Berón se refirió al rendimiento de Mauricio
Victorino y destacó que hay que analizar los contextos: “Una cosa es cuando
tenes que defender todo el partido y otra cuando sos dominante“.
“Por lo que venía jugando el equipo, no fue un buen partido.
Fue de esos días en los que no salen bien las cosas“, expresó el entrenador de
la Reserva. Y agregó: “Faltando tres minutos para terminar el partido hace un
gol Mauricio Victorino de tiro libre. Ahí fuimos a buscar desordenadamente y
por suerte Christian Ortiz pudo empatarlo a los 45 del segundo tiempo“.
Consultado en Diabolicas Radio por el rendimiento de
Victorino, aclaró: “Es un jugador que fue de Selección, yo no descubro nada,
pero el ritmo de la Reserva no es el mismo que el de la Primera División. El
cuerpo técnico de Jorge Almirón lo evalua en el día a día que es distinto a lo
que yo observo“. Y destacó: “Los partidos que jugó lo hizo muy bien, pero
desconozco cuánto tiempo ha estado parado. Siempre hay que tener en cuenta el
desarrollo del partido. Jugó partidos en los cuales no nos atacaron demasiado.
Una cosa es cuando tenes que defender todo el partido y otra cuando sos
dominante y se juega 3/4 para adelante“.
En relación a la importancia que le da Jorge Almirón a que
jugadores del plantel bajen a la Reserva para sumar minutos, opinó: “Le ha dado
minutos a Nicolás Figal, a Victorino, a Néstor Breitenbruch, a Alexis Zárate, a
Villalba. Los que rotan siempre son los de atrás. La Reserva está para
colaborar con la Primera División para que el técnico los pueda tener a
disposición. No veo mal que bajen los jugadores“.
Por otra parte, se refirió al arbitraje del encuentro ante
Gimnasia: “Me parece lamentable que la AFA disponga a un juez que dirigió sólo
dos partidos de Primera, para dirigir a Independiente de preliminar. Al no
tener experiencia y oficio, te encontras con un réferi nervioso al que le pesa
el partido“. Y comentó la expulsión de Figal: “Cuando lo echa a Figal, él toma
la decisión de amonestarlo pero cuando el rival reclama, da vuelta el fallo y
le saca tarjeta roja. Fue un partido áspero“.
Sobre el final del partido, Alexis Zárate protagonizó un
disturbio que terminó con el jugador informado sin la posibilidad de disputar
el próximo encuentro: “Gimnasia golpeó bastante. En el final, Zárate va a
disputar una pelota con el 11 y cuando van los dos al suelo, se va a levantar y
el rival le pega un planchazo en el pecho. Zárate reaccionó con un empujón y
nos metimos todos para separar a los jugadores”.
“No está bueno. Nos metimos para que no pase a mayores
porque los perjudicados son los chicos. No quiero echarle toda la culpa al
réferi pero con uno con personalidad, eso no pasa. Hubiese puesto límites
antes. No he hablado con los jugadores todavía. Uno quiere que no se vuelva a
repetir porque además de perjudicar al equipo y al club, se perjudica el
jugador“, agregó Berón.
Respecto al estado del campo de juego, manifestó: “Con todo
lo que pasó, en lo que menos me fije fue en el césped. Mientras se jugó, no me
pareció que estaba mal. Quizás la regada posterior influyó, pero no lo sé”. Y
advirtió: “No es lo mismo jugar un sábado a la mañana sin nadie, que jugar en
un estadio con gente. Los chicos se muestran de otra manera, se foguean. Pero
jugaremos donde lo dispongan“.
Uno de los jugadores que se destacan en el plantel de
Reserva, es el hermano de Sergio Aguero: “Gastón Del Castillo tiene mucho para
aprender. No es bueno cuando se apresuran los tiempos. No estaba jugando y se
fue ganando de a poco su lugar. A mi me toca tener a los dos hermanos y Gastón
se ganó su lugar sin usar el parentezco. Es un buen proyecto de jugador, pero
tiene 17 años. No creo que le pese ser hermano de Aguero. Él es bastante
inconciente, pero para bien. Por su personalidad, a la hora de jugar se olvida
quién es el hermano y hace lo propio“.
Por último, el entrenador resaltó la responsabilidad que
implica dirigir en Independiente: “Los resultados siempre son lindos, pero
tanto para el que trabaja en divisiones inferiores como en reserva, el trabajo
real es aportarle al equipo de Primera la mayor cantidad de valores posibles.
Las exigencias de los clubes grandes son más”. Y concluyó: “A mí me tocó
reemplazar a Gabriel Milito y no fue fácil por lo que es como persona, lo que
fue como jugador y será como entrenador. Pero uno ya está acostumbrado a vivir
con esa presión“.
Fuente Infierno Rojo

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