Ayer hubo varios trapos en contra del ex presidente.
Comparada dejó un club con un pasivo millonario, tomado
por la barra y con un cancha sin terminar.
En diciembre de 2008 los socios lo reeligieron.
Ay.
Desde entonces, Julio Comparada fue catrasca.
Prometió una mega cancha que al
día de hoy apenas está terminada en un 60%.
No le renovó a Gallego después de
una gran campaña, la última que tuvo el Rojo.
Y aceptó el convite de Menotti
para traer a Garnero.
Rifó el Apertura 2010, último puesto a cambio de ganar la
Sudamericana con Mohamed.
Mientras tanto, dejó crecer a la barra de manera tal
que los delincuentes terminaron copando el club.
Pero la cuestionada gestión
del Aguilar de Independiente no terminó ahí.
Al momento de pasarle el trono a
Cantero, en diciembre de 2011, las arcas del Rojo marcaban un gran pasivo (la
auditoría reveló que era de 328 millones de pesos), hubo 650 cheques
rechazados, numerosos embargos e inhibiciones.
Por esa herencia, la actual
dirigencia denunció penalmente a Comparada y su CD por administración
fraudulenta, en una causa que en un año no generó ningún procesado.
Comparada no hizo nunca más un declaración pública
desde que se alejó de la presidencia del Rojo.
Algunos dicen que vivió el
descenso en Miami. Casi casi como Aruba.
Fuente Olé
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