Ilustró rrrojo
Por Favio Verona
Javier Cantero acaba de cumplir un año de gestión, pero
sabe que si el Rojo baja de categoría será difícil seguir gobernando. “Algunos
quieren verme caer”, afirmó.
Fue el peor año de la historia del club, pero antes de
asumir, Javier Cantero sabía que el cargo no brindaba garantías ni certezas,
que acarreaba un riesgo ineludible. A un año del comienzo de su gestión,
Independiente está en zona de descenso y la vida se le volvió densa al
presidente del Rojo. “Mi familia nunca quiso que yo sea presidente. Sufrí
muchísimo este año, no estaba preparado para tanta exposición. Me empobrecí, mi
salud se deterioró y veo mucho menos a mi familia. Mi señora no ve la hora de
que se termine mi mandato para que vuelva a ser el de antes, se cansó de verme
llegar a la noche en un patrullero. Ser presidente me genera adrenalina, pero
con el tiempo esto puede ser un suplicio”, le confiesa Cantero a Olé .
-¿Teme quedar marcado como el presidente que mandó a
Independiente al descenso?
-Yo soy el principal responsable de que el equipo esté
en esta situación, no me voy a escudar en los errores de la dirigencia
anterior. El fantasma del descenso siempre lo tengo presente, sé que si no nos
va bien vamos a descender. La situación es horrible, pero reversible.
-¿Y qué va a hacer si el equipo se va a la B?
-No me imagino ese escenario, pero si descendemos no sé
si podré seguir. Muchos están esperando que eso ocurra, no les interesa el bien
del club. Quieren verme caer, hacerme renunciar, y por eso se van a venir con
todo. Yo asumí una responsabilidad hasta el 2014, pero ellos están esperando
que la turba me aplaste y habrá que ver como libramos esa batalla. De todas
formas, si al equipo le va bien también voy a correr riesgos porque hay gente
que quiere hacerme daño.
-¿Quiénes son?
-Algunos sectores de la oposición no se bancan que un
cuatro de copas ocupe esta silla. Siempre me subestimaron, y ahora que llevo un
año de gestión me están serruchando el piso para voltearme.
-Usted no tiene antecedentes en el fútbol. ¿En algún
momento pagó derecho de piso?
-Es cierto que me falta experiencia y que tengo que
aprender, pero nadie me hizo pagar derecho de piso porque antes de asumir yo me
preparé hablando con directivos, técnicos, jugadores y periodistas. El hecho de
no tener antecedentes es una ventaja para mi porque aún estoy descontaminado y
traje ideas que a muchos los sorprendieron, como la de sacar a la barra del
club.
-¿Por qué se instaló que usted no tiene peso en la AFA?
-Eso de tener peso en la AFA es una mentira que se ha
instalado para desacreditarme. ¿Qué quiere decir? ¿Quién lo tiene? En las
reuniones de comité cada uno defiende sus intereses, en el fútbol hay pocos
amigos o gente en la que se pueda confiar. También instalaron que desde que
llegué al Rojo lo perjudican los árbitros y eso es una falacia. Independiente
no tiene $320.000.000 de pasivo ni el promedio que tiene por los árbitros.
Fuente Olé
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