Ya el empate estaba enardeciendo al público de
Independiente. Especialmente el porqué de ese empate, las formas, las maneras
de encarar el partido ante uno de los peores equipos del torneo. El correr de
los minutos expuso las falencias creativas y actitudinales de aquellos a
quienes más se les pide. La derrota final hizo estallar a los hinchas en la
cancha, en las charlas de bar y en las redes sociales.
Los principales apuntados fueron Cecilio Domínguez, Braian
Romero y Andrés Roa, jugadores por los cuales el Rojo gastó millones de dólares
y todavía no han dado una contraprestación acorde.
Ante Gimnasia tuvieron otra noche negativa, magra, apagada,
carente de toda idea para quebrar la defensa rival. Más allá de alguna
situación aislada, el equipo de Pusineri no inquietó al Lobo y eso los
fanáticos no lo perdonaron.
Domínguez tuvo una muy buena actuación contra Rosario
Central, siendo pieza fundamental del 5-0, pero en el resto de los partidos del
semestre no ha pasado ni cerca de su esplendor. Incluso, el reclamo
generalizado es que tiene cualidades, pero lo invade una pesada irregularidad.
¿Falta de ganas?
Braian Romero aún no ha explicado adentro de la cancha por
qué Ariel Holan insistió por su contratación y son contadas las ocasiones en las
que desniveló. Con Roa aún hay crédito porque suma pocos cotejos como titular,
pero ya se le empieza a pedir que concrete lo que insinúa.
Fuente Infierno Rojo
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