Lucas Romero admitió que aún le cuesta la readaptación al
fútbol argentino, pero expresó: “Sé que tengo mucho para dar”.
Desde que llegó, Lucas Romero se ganó el puesto y quedó como
mediocampista central inamovible. Respecto al ingreso del nuevo DT, comentó:
“Fernando Berón nos tranquilizó después de una situación difícil, puso paños
fríos, nos dejó jugar un poco más. Nadie quiere que se vaya un entrenador,
además de que teníamos un cariño muy especial por Sebastián Beccacece. No se
nos dieron los resultados. Somos todos responsables de lo que aconteció”.
“Veníamos de varios golpes duros y necesitábamos calma. Fue
una situación extraña, difícil para mí, se me pasó por la cabeza que el DT que
me trajo se fue rápidamente. Trato de trabajar para ganarme el lugar y sé que
tengo mucho para dar”, sumó al análisis.
Siendo sincero, el Perro afirmó: “Sé que no estoy al 100% de
mi rendimiento, se me está haciendo lento el proceso de adaptación. Quiero
encontrar mi plenitud, pero no es sencillo reacomodarse al país tras cuatro
años afuera”.
“En Brasil estaba tranquilo, muy bien, pero me sedujo la
idea de jugar en un club grande como Independiente. Allá se juega muchas veces
por semana, acá es menos exigente la continuidad de partidos y eso me facilitó
en lo físico”, culminó en charla con Fox Sports.
Fuente Infierno Rojo
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