Con el recuerdo en alto
.
Los brazos, sus brazos, más en alto que nunca…
A los 78 años falleció Jorge Maldonado, capitán y símbolo
del Independiente de los 60 y creador del mítico saludo con los brazos en alto.
Todo empezó a fines del 63. El River de Onega y Artime
peleaba el campeonato contra Independiente, mano a mano. El Millo jugaba mal y
perdía. Independiente jugaba mal y ganaba. Y la prensa, al Rojo, lo liquidaba.
“Decían que éramos asesinos del verde césped, delincuentes. Ojo, teníamos cada
pichoncito...”, le recordaba hace años Osvaldo Mura a Olé. Por eso, antes de un
partido, el Chivita Maldonado, capitán, con el aval del Hacha Brava Navarro,
juntó al grupo y le dijo que no darían más notas ni posarían para la foto del
equipo.
Entonces, ingresarían sólo saludar a la hinchada.
Como señal de
protesta.
Y quedó.
Quedó como un símbolo distintivo del Rojo de Avellaneda.
Maldonado jugó 103 partidos e hizo cuatro goles en Platense entre
1948 y 1955, cuando se mudó a la Doble Visera.
Allí, hasta 1964, disputó 166
partidos y metió un gol.
Fue zaguero, volante central y director técnico.
Debutó en el Calamar a los 17 años cuando se produjo una huelga de
profesionales.
En Independiente le costó acomodarse hasta que terminó con la
cinta capitana y su saludo tan mentado y reaccionario.
Luego pasó a Colo Colo
aunque no llegó a jugar.
Se retiró en All Boys, donde a su vez arrancó su carrera
como entrenador.
Según el Diccionario Olé, también fue convocado en 1962 para
la Selección Nacional, además de dirigir a Cipolletti en el Nacional 73 y a
numerosos equipos del Ascenso y el Interior.
También entrenó a la selección
juvenil de Bolivia.
Chivita será velado en Constitución 446, Merlo, hasta las 19
horas del sábado.
Independiente lo homenajea con una bella corona que reza:
“Club Atlético Independiente: a su gran capitán”.
Fuente Olé
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