Por Branco Salvatori
Independiente perdió 3-1 frente a Platense por la fecha 6 de
la Liga Profesional. El Rojo comenzó ganando con gol de Lucas Rodríguez, se lo
empataron sobre el final del primer tiempo y una segunda parte de terror
terminó sentenciando la derrota.
La primera parte mostró una buena versión ofensiva del
conjunto local. Con mucho movimiento de pelota, sumado a la activa
participación de Alan Soñora y Leandro Fernández, el Rojo comenzó a imponerse y
dominar el partido. A los 22, luego de una buena jugada colectiva, Lucas Romero
conectó con Leandro Benegas, que la bajó de cabeza para que Rodríguez la empuje
y ponga el 1-0.
El trámite continuó igual, con el Rey de Copas mejor
posicionado. Hasta que, en el minuto 44, una doble mala salida, primero de
Sergio Barreto y después de Iván Marcone, terminaron en pérdida y Alexis
Sabella estampó el 1-1. Injusto resultado para el desarrollo de los primeros
45.
Los dirigidos por Eduardo Domínguez sintieron el impacto del
gol y tuvieron una segunda mitad para el olvido. Perdió fluidez con la salida
de Soñora, comenzó a errar pases fáciles, no tuvo ningún tipo de circulación y
entró en un desconcierto total, sumado a la mejora futbolística del Calamar.
Para colmo, quedó mal parado y lo pagó carísimo. A los 26,
Horacio Tijanovich la mandó a guardar con rebote en Alex Vigo de por medio y
puso el 2-1. No hubo reacción por parte del Rojo. La desesperación le jugó una
mala pasada y Vicente Taborda puso el 3-1 en un contraataque letal a 3 minutos
del final.
El segundo tiempo de Independiente fue el fiel reflejo del
momento institucional que atraviesa el club: un caos y pura improvisación. Por
segundo partido consecutivo, recibió 3 goles y perdió merecidamente ante un
equipo que está cerca de los puestos de descenso. Se ubica en el puesto 19 de
28 equipos y se viene el clásico de Avellaneda.
¿Habrá volantazo o seguirá todo igual?
Fuente LxR
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