El Rojo
atraviesa un período de crecimiento bajo la conducción de Julio Vaccari, y uno
de los aspectos más destacados de esta mejoría es en el plano defensivo.
A lo largo
de las últimas semanas, el equipo mostró una solidez que antes parecía difícil
de encontrar por varias razones.
El Rey de
Copas logró mantener su arco en cero durante los últimos seis partidos, un dato
que refleja el trabajo meticuloso que el cuerpo técnico viene realizando.
Este
registro no es casualidad, sino el resultado de una organización más sólida en
la última línea, donde los defensores, con el respaldo del mediocampo,
consiguieron ajustar las marcas y ser más eficientes en la recuperación del
balón.
La llegada
de Vaccari trajo consigo una nueva propuesta táctica que prioriza el orden en
defensa y la capacidad para neutralizar los ataques rivales, sin renunciar a
las transiciones rápidas hacia el ataque.
El equipo
ya no sufre las desatenciones de antes, y los números lo respaldan: seis juegos
sin recibir goles, algo que genera confianza de cara a los compromisos que se
vienen.
Este
aspecto defensivo es clave para el grupo, ya que una defensa sólida es el
primer paso para construir victorias. Si bien el trabajo ofensivo sigue en
desarrollo, la solidez en el fondo es una base firme sobre la cual el equipo
está levantando su nivel. Sin duda, un aspecto que mejora día a día.
Está claro
que la incorporación de los refuerzos al once inicial es uno de los argumentos
para entender y defender esta idea.
Vera está
sólido en el lateral derecho, Lomónaco en la zaga se mostró firme y Pellegrino
cuando ingresó también mostró cosas positivas. No debemos relajarnos ni un
instante.
Fuente Soy del Rojo
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