Pavoni: “Lo más peligroso es que los que están abajo nuestro se están arrimando demasiado”.

 

Reportaje: Daniel Galoto, Julián Barral. Trascripción: Julián Barral.

Ricardo Pavoni, dialogó con el equipo de “¡Independiente, el Gran Campeón!”, (Sábados y Domingos en AM 1220, "Cadena ECO"), en el mediodía del pasado Domingo, y tocó todos los temas referidos a la actualidad futbolística de Independiente, comparando el presente momento del equipo, con momentos que él vivió, dentro del equipo Rojo, años atrás.

Pavoni, se refirió a la crisis futbolística que está atravesando Independiente, en la actualidad: “Lo más peligroso es que los que están abajo nuestro se están arrimando demasiado, y va a llegar un momento que, lamentablemente, nos va a agarrar la locura general, y ahí vamos a ver qué es lo que va a salir del equipo en el sentido de  la actitud, en un montón de cosas”.

Además, se refirió a los avances tecnológicos, con los cuales la hinchada se organiza para, por ejemplo, dar vueltas las banderas en señal de protesta: “Está la parte peligrosa, llamémosle, porque yo siempre dije, y saben que mantengo lo que dije, que no creo en las críticas constructivas, yo creo en las críticas con buena intención, y por ahí vos pones una crítica con buena intención en el Twitter, en lo que sea, y la toman por otro lado, y lógicamente eso trae problemas, de juntarse, hacer lío, que eso, lamentablemente, no le hace nada bien, pero, de cualquiera manera, tenemos que adaptarnos a los tiempos que hay, cada vez va a estar más adelantado, y, lógicamente, nuestros nietos verán el adelanto total, que ojalá que, mucho antes, lo podamos ver nosotros también”.

También, Pavoni, realizó una pequeña comparación entre los hechos ocurridos luego de finalizado el partido con incidentes entre hinchas y jugadores de Independiente, y lo que él vivió, junto con su plantel, años atrás, luego de una derrota ante Platense: “Nosotros perdimos ese partido tres a cero, que si ganábamos, prácticamente, éramos campeones, porque, en aquella época, nos íbamos a cuatro puntos de diferencia, no estábamos en los tres puntos todavía, y tuvimos la desgracia de perder, jugamos muy mal, y la gente nos empezó a insultar, nos metimos adentro del vestuario, y salimos todos juntos, acordate que estábamos en el vestuario viejo e íbamos a donde estaban los coches, que era, digamos, donde está hoy el playón. Nosotros íbamos caminando todos que, ponele, éramos 18 o 20 con todos los muchachos que habían visto el partido, y atrás toda la gente insultándonos. Cuando llegamos a los coches, ahí nos juntamos todos y dijimos ahora sí, acá estamos, mano a mano, y nos agarramos todos a trompadas, con la barra brava, pero era distinta a la de ahora, en aquella época era mano a mano y que sea lo que Dios quiera, ahora tenés el peligro, el miedo, o lo que fuera de que estén armados, que tengan cuchillos. No digo que eso nos dio más ánimo, pero nosotros sabíamos lo que queríamos, y, lógicamente, ese partido nos cayó muy mal, pero nosotros teníamos la costumbre de pedirle permiso al técnico y quedarnos solos, en el vestuario o en la mitad de la cancha solos, nosotros, cuando digo nosotros hablo de todo el plantel, y ahí nos decíamos las cosas que teníamos que decirnos, cara a cara, hombre a hombre, si alguno se molestaba era problema del otro. Nosotros somos de la época de los códigos, de la época que era mano a mano, de la época que no había mensajes que los escuchara todo el mundo, te la bancabas conmigo o no te la bancabas, era la época que te íbamos a buscar y nos agarrábamos a trompadas, y esa es la realidad. Ahora cambió, cambió porque la tecnología cambió tanto que el jugador dura muy poco, entonces no se puede, no te digo integrar, pero no puede darse cuenta de lo que es Independiente, y darse cuenta de que Independiente necesita ganar y tenés que ganar sí o sí, y eso hace que, lamentablemente, no pueda juntarse un plantel estable, que tenga los códigos necesarios, entonces cuando se pierde, da la sensación que, se vienen mucho abajo, se le viene el ánimo, entonces eso cada vez se hace mucho más peligroso y lo más peligroso de todo, desde el punto de vista deportivo, es que los equipos que juegan contra nosotros no nos respetan, eso es lo que yo tengo más miedo, en el sentido del ascenso, el rival ya nos ataca, nos enfrenta, por más que sea Huracán, un equipo de primera, no importa, estamos los dos en las mismas condiciones y vos tenés que ponerle, un poco, la historia arriba en la cancha. El hecho de que pierdan el miedo, que pierdan el respeto, que pierdan el respeto a la historia hace que te ataque, y cuando te atacan demasiado, que te pierden el respeto, vos hechas para atrás y ahí te vacunan y ya no podes ganar más”.

“Va a ser un partido duro. Yo no digo que la cancha sea más chica, pero da la sensación porque los tejidos están más cerca, y, por ahí, a nosotros nos conviene, en cancha grande nos desordenamos bastante y en cancha más chica, como pasó la vez pasada en el interior, en canchas que son, teóricamente, del mismo tamaño, pero más reducidas visualmente, a vos te da la sensación que es más corta y, te da la sensación que, están más juntos, y te da la posibilidad de defenderte mejor, entonces eso, quizás, nos sea para bien en caso de meter un gol, y después, ahí, defenderlo a muerte”.

En otro tema, se refirió a las declaraciones del líder de la barra brava de Independiente, Pablo “Bebote” Álvarez: “Ha tenido que ir a Domínico y lo ha hecho, porque nosotros lo hemos visto entrar con los coches, después va la policía, etc., etc., y yo creo que son gente que, por ahí, no digo que este bien o este mal, han ido a hablar con los jugadores, y en este caso no sé hasta qué punto podamos decir que fueron ellos los de los perros famosos, si fueron ellos los de los quinchos, no corresponde creo que a ninguno. Uno hace suposiciones por toda la historia pero es difícil decir quien fue y quien no fue”.

Para finalizar, Pavoni, dio su parecer sobre cómo pueden los jugadores torcer el rumbo de este difícil momento: “Tienen que reunirse, reunirse entre ellos, pero sólo entre ellos. Uno tiene el problema, por ejemplo, actual de Boca, que nadie hizo nada, que nadie dijo nada, pero se sabía que se agarraron a trompadas dos jugadores, y puede haber sido cierto, ¿Vos pensás que nosotros no discutíamos entre nosotros?, nosotros nunca llegamos a las manos, pero sí discutíamos fuerte y mal cuando nos reuníamos. Creo que tienen que reunirse los jugadores, solamente los jugadores, y decirse, cara a cara, vos sos un desastre por esto, esto y esto, vos estás haciendo mal las cosas, o vos no entrenas como corresponde, o vos no metes como corresponde, todo lo que tengas que decir, se lo tenés que decir, pero que muera ahí, ahí esta el tema”.

Fuente El Gran Campeón