Insúa, ¿Necesidad o golpe de efecto?

Por Ariel Vilachá

Que Federico Insúa es buen jugador no está en discusión. Ahora hay varios puntos a tener en cuenta a la hora de definir una contratación como la del Pocho.

En primer lugar hay que hablar de su participación en la despedida de Gaby Milito. Lo que se dice “jugó para la gente”. Al punto que fue el más aplaudido, obviamente luego del Mariscal. Seguramente si no hubiera jugado tal vez no estaría en la consideración para que vuelva.

Allí la dirigencia tomo nota. El “la gente lo quiere”, el “conoce el club” y el “nos encanta, nos puede dar un salto de calidad” pasaron a ser los argumentos para empezar a negociar, además de su finalización del vínculo con Vélez.

Ahora bien, también volviendo hacia atrás una vez más en el tiempo, ésta conducción pudo haberlo traído cuando asumió, en enero 2012, cuando el jugador se moría por volver a Avellaneda, sabiendo que ya no estaba Comparada y que no iba a hacerlo hasta que no se fuera. Se fue y quiso volver. Pero integrantes de la sub comisión de fútbol (y hasta el propio presidente) dijeron que el ciclo estaba cumplido, que no era necesario y prefirieron hacerle caso al DT Ramón Díaz de renovarle el préstamo a Matías Defederico. Los resultados están más que a la vista.

Entonces la pregunta que surge es: ¿Si hace exactamente 2 años no era necesario, porque ahora sí lo es? 

Indudablemente surge que para dar un golpe de efecto y en que ahora es querido por la gente, y que ya que la gente pide refuerzos, se lo traemos y encima es uno que es querido. Redondito. Y en el caso que si sale mal (como al Tolo que lo pidió el 90%) la excusa está garantizada. 

También es justo decir que el propio Cantero aclaró que no hay presupuesto para traerlo, salvo que se produzcan vacíos en el plantel que permitan compensar con algunas salidas la llegada de Insúa (hasta ahora solo se fue Pichón Nuñez).

Pero que todo cambia con un par de malos resultado en el verano, más lesión del Rolfi, pensando en que “si se vuelve a lesionar, a quien ponemos?”

Tambien están quienes internamente dicen que no seguiría el Rolfi a partir de Junio y por eso la llegada de Insuá.

El otro punto a tener en cuenta es:

¿Es necesario Insúa?.¿Se necesita un refuerzo en esa posición? ¿O se necesita un 9?

El debate se abre entonces, y podemos decir que sí, que se necesita un 9, pero también que se ha probado con los 9 que tiene actualmente De Felipe y tampoco convierten.

Y allí abrimos otra ventana, ¿no debería cambiar el esquema el entrenador? Por más que llegue el mejor 9 del fútbol mundial (póngale el nombre que quiera) si no lo llega la pelota le va a ser igual de complicado que a los distintos 9 que están ahora (se llamen como se llamen).

Pero hay un punto más a tener en cuenta para la llegada de Insua. Su alta pretensión de contrato y el dinero adelantado (o deuda que tiene Vélez con él) de 200 mil dólares.

Para tener una idea del contrato se habla de entre 600 y 800 mil dólares (dependiendo la forma de pago y el tipo de cambio al que se cierre) Todo por 18 meses.

Con este contrato hay varias cuestiones. Primero que el mismo se extendería más allá de la finalización del mandato de Cantero. (algo que le reclamó en campaña a la CD anterior, y como ejemplo uso el del contrato de Puma que Comparada firmó por 3 años más fuera de su gestión). El segundo punto es que Independiente NO TIENE PLATA PARA PAGAR SEMEJANTE CONTRATO. El club aún tiene (como solo algunos ejemplos) que saldar la deuda por Farías, saldar la deuda con Olympiakos por Nuñez (por la que puede recibir quita de puntos), pagar parte de la convocatoria, o como pidió De Felippe tener al día a los que están. El día de mañana que no nos vengan con sorpresas de que los jugadores se reúnen en la sala de conferencia de prensa de Dominico con el presidente para que el periodismo se entere que se le debe plata al plantel. O peor aún que luego de que finalice el contrato de Insúa, la próxima CD reciba un reclamo del jugador para que le paguen lo acordado (algo a lo que tiene pleno derecho). 

Entonces, desde ése punta de vista hay que pensar antes de actuar por el impulso de un par de resultados adversos de verano.

Saben que Insúa es uno de mis jugadores preferidos, su tiempo para venir era antes. Lo quiero igual en mi equipo, siempre. Ahora soy conciente que si no tengo para comer, no voy a buscar la manera para ir a comprarme un auto importado en cuotas…

No podemos reclamar refuerzos en los mercados de pases y luego en noviembre agarrarnos la cabeza por el resultado del número del pasivo y decir “en que la gastaron?”

Hay que saber gestionar y administrar.

Hoy las prioridades económicas del club son otras.

Fuente Más Rojo